domingo, 18 de junio de 2006

NOTICIAS COMENTADAS (111)



ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LA SITUACIÓN ACTUAL.





PRIMERA.

El Presidente Rodríguez ganó las pasadas elecciones. Es decir, utilizando la terminología clásica, se podría afirmar que tiene legitimidad de origen. Dicho esto, la victoria electoral (que coincidió con el atentado terrorista más grave de la historia de España) fué corta. Esto significa, en términos democráticos, que los ciudadanos no le otorgaron poder para hacer grandes cambios. Si lo hubieran querido, la victoria no habría sido tan escasa. A pesar de ello, el Presidente Rodriguez (incluso con los anuncios de talante dialogante) ha seguido y sigue por una camino muy diferente al de la moderación y la prudencia.

SEGUNDA.

Una de las más claras manifestaciones de la falta de talante dialogante del Presidente Rodriguez es su aceptación (al menos en el terreno de los hechos) del vergonzoso y antidemocrático Pacto del Tinell. Como es sabido, el Partido Socialista Obrero Español (que cada uno piense si estas siglas reflejan la realidad) ha aceptado el acuerdo de los partidos catalanistas de excluir, de las instituciones democráticas, al principal partido de la oposición. Esta es una declaración de guerra, no una declaración de talante dialogante. Ningún Presidente de sociedad democrática se ha atrevido a esta repulsiva treta antidemocrática. Para que se entienda mejor. ¿Qué sucedería si el Partido Popular hiciera lo mismo?

Supongo que recuerdan las manifestaciones de 'la izquierda' por el caso Prestige (¡Ahora el PSOE rectifica y dice que la causa del desastre se debió al mal estado del barco¡), Irak y lo que haga falta. ¡Asesinos! Ataques a las sedes del Partido Popular, acoso a los dirigentes y militantes de este partido, lanzamiento de huevos, piedras y basura. Por cierto, estas actitudes antidemocráticas se han repetido en Cataluña, en diversos actos políticos en los que participó el Partido Popular. Ninguno de los partidos catalanistas sufrió acoso o agresión. Pero el oasis catalán no se inmuta.

Solamente se indignarían si les agredieran a ellos. Este es un claro signo de enfermedad moral. Pero, claro está, no lo reconocen. Por eso están enfermos. Difícil diagnóstico. Los medios de difusión hacen su trabajo, con variantes más o menos dignas, y los políticos catalanistas, algo parecido. En todo caso, apagamiento mediático. En el fondo, se lo han buscado. Ya lo dijo la diputada de I.U., Angeles Maestro, cuando el atentado de las Torres Gemelas: 'Se lo estaban buscando'. Esta es la superioridad moral de 'la izquierda'.


TERCERA.

Hay un amplio sector de 'la izquierda' que no acepta que 'la derecha' sea una opción más en el juego democrático. De esta actitud antidemocrática debemos excluir a los socialistas dignos y respetables como Nicolás Redondo, Rosa Díez, Maite Pagaza, Gotzone Mora y un largo (pero insuficiente) etcétera.

Curiosamente (para algunos, no ya para mí) 'la izquierda' en el poder ningunea (en el mejor de los casos) o excluye y desacredita (en el peor) a los mejores. A los ejemplos anteriores podemos añadir, entre otros, a Cristina Alberdi. Si se comportan de forma tan miserable con 'los suyos', qué no harán con los 'peperos', a los que desprecian y califican como 'fachas'. Ya lo dijo Alain Finkelkraut, 'La izquierda ya no tiene ideas; sólo tiene enemigos'. O sea, desacreditemos a los que no aceptan lo que decimos. Mintamos. Nuestra superioridad moral nos lo permite. Es por una buena causa. La nuestra. Los más tontos o ilusos, incluso, se lo creen. Son los 'progres' buenas personas, que los hay.

Por cierto, tal vez no tengan 'enemigos' pero ya han molestado a mucha gente con su sectarismo.Por ejemplo, las Víctimas del Terrorismo ('fachas'), buena parte de la Iglesia ('reaccionarios'), parte del Ejército ('franquistas') y recientemente la Policía o parte de ella. Creo que están estudiando el insulto adecuado. Por no hablar de los diez millones de votantes del Partido Popular. El Presidente Rodriguez no ha gobernado, ni gobierna, para el consenso. Este es el problema. En todo caso, consenso con partidos independentistas que desprecian a España para modificar la Constitución via (fraudulenta) Estatutos de Autonomía. Ahora, Naciones o Realidades Nacionales.


CUARTA.

La 'derecha' está demasiado acomplejada. Aquí mismo, Pere Rotger promociona el .cat catalanista independentista. ¿Será que quiere parecer nacionalista? ¿Creerá que ser nacionalista es progresista? ¿Qué cree? Otro político, el concejal Araujo, hace pinitos nacional-catalanistas, forzando a que la alcaldesa Cirer le de un tirón de orejas. A otro nivel, más culto e inteligente, Ruiz Gallardón hace lo mismo. Antes de actuar mira de reojo a 'la izquierda'. ¿Se enfadarán? ¿Lo habré dicho bien? ¿Qué dirán de mí?

La última estupidez de Ruiz Gallardón (lo que sorprende en alguien culto e inteligente, pero muestra la fuerza de los complejos) ha sido aconsejar que se olvide el 11-M. ¡Olvidar el mayor atentado de la historia de España! ¡Todavía no aclarado! ¡Lo único claro es que no está claro! Pero Alberto no quiere incomodar a la izquierda. ¡No seamos antiguos, escuchemos a 'la izquierda'! ¡Olvidemos lo que ellos dicen que debemos olvidar! Pero el Presidente Rodriguez revive la guerra civil (la que le conviene para sus propósitos de permanecer en el poder a cualquier precio) y trata de revivir las dos Españas. Es decir, por una parte, 'los buenos' (Ellos) y por otra, 'los malos' (Los Otros). O sea, talante dialogante.


QUINTA.

La responsabiliad no es sólo de los políticos. Por ejemplo, la vergüenza que producen ( a cualquier persona decente) los recientes hechos anti-PP en Cataluña, no son exclusiva responsabilidad de los políticos sino, también, de buena parte de los catalanes. No condenan pública y rotundamente estos hechos antidemocráticos. ¡No sea que me confundan con alguien del PP!

Si los catalanes aprueban el Estatut, incorporarán la bilateralidad (Estado y Comunidad Autónoma, ahora Nación Catalana), se apropiarán de competencias propias del Estado y, además, las blindarán. Se trata de crear una Administración única cuya consecuencia inmediata es la expulsión del Estado, representado por el Delegado del Gobierno. O sea, solidarios como el que más. El catalán como única lengua oficial, con funciones discriminatorias. Ya se ponen multas de 1.800 euros porque el ticket de venta esté en castellano. ¡Aún antes de aprobar el Estatut! ¡Qué nos espera! Estas y otras tropelías ilegales y desvertebradoras, nos encaminan a un futuro incierto y, cada vez, más crispado. Excepto, tal vez, para Otegui y sus muchachos a los que el PSOE lleva años mirándoles a los ojos, como aconsejaba Pepiño Blanco. ¡Encima se creen que somos tontos!

Esperemos que la crisis económica (si viene a final de año) no agudice más la frustración y el malestar de, aproximadamente, diez millones de votantes. Aunque la mansedumbre acomplejada es signo de diferenciación de buena parte del PP ¿aceptarán siempre que les traten como basura política y sin enfadarse en serio? Se está jugando con fuego.


Sebastián Urbina.

sábado, 17 de junio de 2006

ARTÍCULO (JUNIO/2006)

ARTÍCULO

Ahora que estamos en pleno Mundial de Fútbol rescato uno de mis viejos artículos.



¡gooooooool!

¡España! ¡España!, Nuria estaba despendolada. Se había puesto de pie con los brazos en alto y aullaba el gol que había metido Morientes. Su padre, Jordi, estaba acurrucado en un sillón mirándola atónito e indignado. Aprovechando que Nuria encendía un cigarrillo, sugirió cambiar a TV3. Dijo, ‘Fan un reportatge molt interesant sobre la cría del tomatec a la terra ferme’, pero la mirada asesina de Nuria le disuadió. Se desentendió del clima españolista que inundaba su casa (¡si lo viera el abuelo Adrià!) y se preguntó qué había hecho mal. Le había hablado del Decreto de Nueva Planta, de Franco y de la opresión secular. De Prat de la Riba, de la hegemonía burguesa de la ‘Lliga’, de Cambó, de la Esquerra, con Macià y Companys y muchas cosas más.

Hete aquí que su hija, Nuria, estaba aplaudiendo al opresor, sin rubor ni sentimiento de culpa. Pensó en la normalización lingüística. Se han quedado cortos. Lo que necesitamos es una normalización ideológica. Mientras estaba haciendo planes para una recuperación en toda regla sonó el timbre. Riiing. María, la esposa de Jordi abre la puerta a Rubén, un simpático ecuatoriano que sale con Nuria. Al pasar junto a Jordi le saludó, ¡Hola Jordi!. Éste hizo un mínimo ademán con la mano derecha en forma de saludo como si estuviera absorto con el partido de fútbol. En realidad, había decidido no mirar a la otra víctima del opresor y su vista se fijaba en un lugar intermedio entre el televisor entreguista y una ventana que daba al patio interior. De tanto mirar había descubierto una pequeña mancha de humedad en la parte superior derecha de la ventana. Se adivinaba un incipiente descascarillado en la pared. ¡Todo pasa!, pensó para sus adentros.

Rubén estaba animoso como siempre. Se le ocurrió decir que ya que Ecuador no podía ganar que ganara España. ¡Aquello era demasiado! La bota española les había colonizado y oprimido. En vez de sentirse como él, un resistente, se alegraba de las victorias del enemigo. ¡Y podría ser familiar suyo! Pensó en las ventajas de las parejas de hecho. Pero no le duró mucho tiempo la felicidad. ¡Y si tienen un hijo! Al menos que le pongan Atahualpa, ¡pero este ‘vendido’ es capaz de ponerle Francisco Pizarro!

María sacó unas cervezas y unos taquitos de jamón. Se le notaba que era de Teruel. Gracias María, dijo Rubén. Éste miró a Jordi quien se puso la mano derecha en el estómago simulando algún problema estomacal. No terminó aquí la cosa. Un pase medido de un jugador periférico que debería negarse a jugar con la camiseta española y ¡zas! Otro gol. ¡Gooooool! Esta vez Nuria y Rubén saltaban alborozados, abrazándose. Jordi vio la batalla perdida y, una vez que los ánimos se calmaron, amagó un movimiento estratégico. ‘En realidad- dijo- lo que a mí me gustaría es que ganaran los de Camerún’. Era toda una declaración de principios. Frente a la opresión blanca, y encima españolista, él reivindicaba el internacionalismo futbolero. Pero no colaba. Le conocían bien.

Olores mezclados y, a veces, irreconocibles entraban silenciosamente en el salón. A fritura, a caballo, a coche de gasoil, a tufo y a jazmín, un jazmín de la India que tía Merche, como la llamábamos todos, tenía en su pequeño vergel. Una terraza llena de macetas que cuidaba con mimo y explicaba con rigor científico. ‘Este año las petunias van mejor que el hibiscus; ¡y no digamos nada de la pereskia! Tía Merche se asomó a la calle y vio a Rubén y Nuria. ‘Adiós majos’, les dijo. Ellos se volvieron exultantes, ‘Hemos ganado’. Mientras les miraba con gozo musitó, ‘Este Barça últimamente lo gana todo’.

Sebastián Urbina.

Junio 2002.

domingo, 11 de junio de 2006

NOTICIAS COMENTADAS (110)

Leo (ElMundo/11/6/2006) las declaraciones de ALBERT BOADELLA.


'Albert Boadella resumió los 223 artículos del Estatut en sus particulares 'Diez Mandamientos'. A través de ellos considera que la Generalitat está consiguiendo crear un 'territorio virtual' donde 'todos debemos aceptar el mapa de los Paises Catalanes que nos muestra TV3, convencernos de que todos los males de Cataluña provienen de Madrid o viajar siempre hacia el norte para evitar conocer el resto de España ... En su defensa del bilingüismo, criticó el apartado del texto estatutario donde 'la protección del catalán es el arma contra el castellano' ... Arengó a los presentes a que no apoyaran el texto porque 'no podemos decir que sí a un Estatut que discrimina a los catalanes que hablan castellano y que no se sienten nacionalistas. Pericay fué aún más lejos al considerar que la única amenaza para Cataluña es el Estatut, que es un elemento de fractura encabezado por Pascual Maragall'.



Título de la noticia: DENUNCIA DEL VICTIMISMO Y DEL SECTARISMO.




Aunque muchos catalanes no lo crean, anestesiados por más 25 años de paz pujol-tripartita-catalanista, nunca podrán pagar a A. Boadella, X. Pericay, A. Espada y un largo etcétera, el favor que les hacen. El sectarismo autocomplaciente y enfermizo de buena parte de la sociedad catalana hace que los diagnósticos acerca de si mismos estén equivocados. Pero los diagnósticos equivocados no pueden curar una enfermedad.


Pues bien, Cataluña no está enferma porque los entes colectivos no enferman, ni se indigestan, ni hablan catalán. En cambio, un importante sector de catalanes sí está anestesiado. Creen que son unas víctimas. ¡Y llevan siglos así! ¡Por esto la deuda crece! ¡Creen que son los mejores! De España (con perdón) por supuesto. Sólo tratar de aclarar qué significa 'mejor' o cualquier otra sutileza analítica sería considerado como un insulto intolerable. ¡Comparar la España cutre (una tautología) con la gloriosa Catalunya!


Conozco catalanes con estudios universitarios (sí, ya sé que esto, hoy, no dice mucho; más bien poco) que al hablar, por ejemplo, de A. Acebes (el político del PP), lo comparan con un fascista. ¡Se lo creen de verdad! Con esta enfermedad a cuestas (que ni los ambulatorios catalanes pueden curar) es comprensible la nociva, y peligrosa, deriva de una parte de la sociedad catalana. Ya comentamos, hace poco, la AGRESIÓN de unos nazionalistas catalanistas a Arcadi Espada. El pasado diez de Junio, M. Rajoy fué recibido en el mercado de Collblanc, en Hospitalet del Llobregat, a los gritos de 'FASCISTA', 'VAS CONTRA CATALUÑA', ASQUEROSO' y otras lindas expresiones propias del famoso 'seny' catalá, marca de fábrica.


A pesar de que la estupidez y el sectarismo están extendidos (incluso en el oasis catalán), tales muestras de salvajismo no son espontáneas. El tristemente famoso Pacto de Tinell, por el que los progres de salón y los nazionalistas acuerdan excluir al principal partido de la oposición de los instituciones democráticas, es un aspecto central de este tipo de situaciones antidemocráticas. Dado que mienten muy bien, traspasan a las víctimas sus propias maldades y miserias. Recordemos que han sido ellos, los progres y nazionalistas, los que han cometido una tropelía inaudita en una sociedad democrática. ¡Excluir de las instituciones democráticas al principal partido de la oposición!


¿Por qué se puede cometer este atropello sin sonrojo, ni protestas? Porque los 'buenos catalanes' están encantados de conocerse y de vivir en el paraiso catalán. La chusma charnega debería dar las gracias por permitirles estar aquí. ¡Y encima protestan y nos critican! ¡Es que somos tan buenos que parecemos tontos! La anestesia catalanista hunde cada vez más al enfermo. No ven nada (que no les interesa) y no reconocen nada (que suponga que hacen algo mal). Un ejemplo lo tenemos en las declaraciones que hizo el Conseller Huguet (lo malo es que lo piensan muchos otros) comparando el boicot al cava catalán con la persecución de los judíos por los nazis. Sólo una sociedad que ha perdido el sentido del ridículo puede aceptar que le representen estos tipos. Pero lo malo es que representan bien a una buena parte de los catalanes. Muchos de ellos critican (en privado) los miserables comportamientos que antes he citado (u otros), pero no se les oye en público. ¡No sea cosa que nos confundan con alguien del PP! Tan bajo han caído algunos.


Sebastián Urbina.

martes, 6 de junio de 2006

ARTÍCULO/ JUNIO/ 2006.

ARTÍCULO.



(En homenaje a Arcadi Espada, agredido por nazionalistas catalanistas).





MORALES CÁLIDAS Y MORALES FRÍAS.


Dice Charles Darwin, en su libro El origen del hombre, que los sentimientos morales cálidos evolucionaron por selección de grupo. Digamos, brevemente, lo que entendemos por moral cálida y por selección de grupo.

Por moral cálida o sentimientos morales cálidos podemos entender los sentimientos que no van más allá de los límites del propio grupo. Esto sucedería con los animales no humanos. Es decir, éstos tendrían una 'simpatía genética' hacia los miembros de su grupo y una 'antipatía genética' frente a los miembros de otros grupos.

De ahí que la selección de grupo sirve para dar cuenta de la aparición de la moral cálida o los sentimientos morales cálidos. ¿Es que hay otros? Pues sí. Lo podemos ver en la idea del economista F. Hayek, de que los cambios fundamentales en la especie humana pasan, básicamente, de una sociedad 'cara a cara', a una sociedad 'abstracta'. O sea, mientras que en el primer tipo de sociedad tiene cabida (de forma 'natural' podríamos decir) la moral cálida, en el segundo tipo de sociedades (en las que no tenemos, básicamente, relaciones 'cara a cara' sino con desconocidos, relaciones anónimas) tiene su asiento la 'moral fría'.

Dicho de otro modo, mientras que las relaciones sociales se dan entre parientes (en el primer tipo de sociedad) y éstas constituyen la 'moral cálida', las relaciones sociales que se dan en sociedades extensas (no tribales) no suelen consistir en relaciones íntimas sino en relaciones anónimas. Todo esto, junto con otras complejidades, daría lugar a la 'moral fría', que sería la típica de nuestras sociedades actuales.

El paso de la moral cálida (típica de la aldea o la tribu; no parece importante distinguir, aquí, entre bandas, tribus y jefaturas) a la 'moral fría', se parece (sólo se parece) a la distinción elaborada por el filósofo del derecho, Herbert Hart, al distinguir entre sociedad simple y sociedad compleja. En la primera, habría conexiones intragrupales fuertes (dado su pequeño tamaño, un marco relativamente estable, creencias comunes y relaciones de parentesco) pero al cambiar las circunstancias mencionadas, ya no serviría el esquema típico de reglas de este tipo de sociedad. Es decir, ya no bastarían las reglas primarias de obligación, que dicen a los miembros del grupo lo que hay que hacer o no hacer.

En el nuevo contexto social, más extenso y complejo, se necesitarían reglas secundarias que se encargarían, entre otras cosas, de la identificación y eventual castigo de los infractores de las reglas. Y lo harían de forma más precisa y previsible que en el sistema anterior. No es mi intención seguir, aquí, con otros aspectos de la teoría Hartiana, que suponen el paso de una sociedad simple (formada sólo con reglas primarias de obligación) a una sociedad compleja (formada no sólo por reglas primarias de obligación sino, además, por reglas secundarias de reconocimiento, cambio y adjudicación) sino sacar un corolario de todo lo dicho y aplicarlo a las ideas nacionalistas.

Los nacionalismos transmiten la idea de que hay una 'moral cálida' propia de los miembros del grupo. NOSOTROS y no los maketos, NOSOTROS y no los charnegos, NOSOTROS y no los forasteros, somos titulares y merecedores de esta 'moral cálida'.

¿Qué tiene de bueno esta 'moral cálida'? Es la expresión de la familia unida, de la tierra madre, de los cánticos emocionados a símbolos comunes, de pertenenecias interiorizadas. Es decir, es la solidaridad fuerte entre los miembros de la tribu y excluyente para 'los otros'.

¿Cuál es el problema? En primer lugar, que se prescinde de la 'moral fría', que se refiere a los derechos de las personas por el hecho de serlo. Con independencia del azar que supone nacer aquí o allí. Es decir, la 'moral cálida' excluye la moral universal de los derechos humanos, que se refiere a las personas por el hecho de serlo. No por pertenecer a una tribu determinada.

En segundo lugar, esta apelación, explícita o implícita, a la tribu, es falsa. Vivimos en sociedades extensas. De la misma manera que no tiene sentido (salvo para los políticamente inmaduros) soñar con la aplicación de la democracia ateniense a nuestras sociedades actuales, tampoco la tiene soñar con solidaridades intragrupales, como si realmente viviéramos en sociedades de carácter tribal. Aunque algunas traten de parecerlo. Pero no sirve hacer de avestruz. Por eso los nacionalismos vivien de la mentira y de la exclusión, más o menos disimulada. Pues bien, esta es una de las características de los nacionalismos. La desvirtuación, penosa y peligrosa, de la realidad social.

Penosa, porque (de forma similar al sueño de la democracia directa, hoy inaplicable a las sociedades extensas) supone ignorar, de buena o mala fe, que nuestra realidad social no es equiparable a una tribu. Peligrosa, porque las solidaridades intragrupales son excluyentes. En realidad, la coherencia nacionalista debería llevarles a defender los 'derechos humanos para los míos'. Es decir, a una farsa, a veces, sangrienta. A veces, a la creación de ciudadanos de 'pata negra' (los miembros de la tribu) y los de segunda clase, 'los otros'.

Para los que piensan que exagero, debo recordarles las recientes palabras de un senador del PNV, Javier Maqueda. En el 18 Congreso del Partit Socialista de Mallorca (PSM) afirmó:
'El que no se sienta nacionalista, no merece vivir'. Estas repugnantes palabras fueron aplaudidas a rabiar por el auditorio. Literalmente. Es decir, 'moral cálida' para los miembros de la tribu y desprecio y, a veces, muerte, para 'los otros'.

Sebastián Urbina.

jueves, 1 de junio de 2006

NOTICIAS COMENTADAS (109)

Leo (ABC de Sevilla/1/Junio/2006)
las declaraciones de ROSA DÍEZ.


Título de la noticia: QUEDA GENTE DECENTE EN EL PSOE.



'La eurodiputada socialista ha acusado hoy al secretario general del PSE-EE, Patxi López de 'RELATIVISMO MORAL Y FALTA DE CUAJO DEMOCRÁTICO' grave ...

Díez considera una 'QUIEBRA MORAL Y DEMOCRÁTICA GRAVE' el que un partido democrático como el PSOE dialogue con una banda terrorista ...

Así, advierte del 'DAÑO EN TÉRMINOS DE PEDAGOGÍA DEMOCRÁTICA' que puede hacer un partido democrático como el PSE, el que se reconozca como interlocutor político a una banda terrorista. Todavía soy incapaz de reaccionar. Me parece fortísimo'.


Ya lo hemos comentado en otras ocasiones. Hay, en el PSOE una quiebra moral y política de profundo alcance. Hablaré, con perdón, de mí. A mí, como ciudadano, ROSA DÍEZ me parece una mujer admirable y tiene todo mi apoyo y simpatía. En cambio, el Presidente Rodriguez me parece unas cosas que no quiero decir pero que son muy negativas.

El problema es el siguiente: ¿Cómo es posible que haya una diferencia moral y política tan grande, entre unos y otros socialistas, que me obliga, con gusto, a besar la mano de Rosa, con admiración y afecto y huir de la presencia del Presidente?. Algo así como, 'Aparta de mí ese cáliz'.

A menos que mi capacidad de apreciación esté gravemente alterada, hay una realidad que no me invento. Unos socialistas son marginados por otros. Rosa es un ejemplo (junto con Nicolás Redondo, Gotzone Mora y otros) de este sectarismo del pseudosocialismo gobernante. Marginan a la gente más decente de su propio partido.


Creo que esto muestra que la camarilla gobernante lleva una deriva muy peligrosa, lo que es advertido no sólo por los populares sino por un sector, el mejor, del socialismo español. En este sentido, Vidal Quadras ha propuesto que si, en las próximas elecciones, el actual Presidente es derrotado, los populares deberían hacer una oferta a los socialistas (los buenos para entendernos) para establecer un techo a las tranferencias de competencias y evitar una situación de permanente provisionalidad, y modificar la ley electoral para que los nacionalistas antiespañoles no tengan la llave de la política nacional.

Será muy difícil. Se necesitará grandeza de miras por ambas partes. Y hay poco de esto. Ojalá me equivoque.

Sebastián Urbina

NOTICIAS COMENTADAS (108)

Leo (ElMundo/1/Junio/2006)

'El Presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, dió su expresa autorización al secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, para anunciar el inicio de una negociación incluyente con la ilegalizada Batasuna ... Vulnerando la Ley de Partidos, la sentencia del Tribunal Supremo, el Pacto Antiterrorista, la resolución del Congreso de los Diputados y sus propios compromisos públicos ... Zapatero incumple su palabra y autoriza una 'negociación política' con Batasuna'.


Título de la noticia: SOCIEDAD ANESTESIADA.



Seamos suaves, vivimos en una sociedad anestesiada. ¿Por qué? Porque, por ejemplo, en la entrevista que el Presidente Rodriguez concedió al diario El Mundo, el 17 de Abril de este año dijo, entre otras cosas, que 'evidentemente no habría diálogo con ninguna fuerza política ilegalizada. Aseguró que no pagaría ningún precio político en una eventual negociación con la banda. Y precisó sus prioridades: 'Primero, la paz y luego, la política'.


Repitamos:
El PSE iniciará una NEGOCIACIÓN POLÍTICA con un partido que ha sido ilegalizado por los tribunales y considerado como una prolongación de la banda terrorista. Ni Batasuna ni la banda terrorista han renunciado a la violencia.



A mí no me sorprende lo que hace Rodríguez. Le creo capaz de esto y más. Un presidente de Gobierno que aparece, en los primeros días de su mandato, como el paladín del talante y del diálogo y, más tarde, acepta el Pacto de Tinell, por el que se expulsa de las instituciones democráticas al principal partido de la oposición, es un Presidente único en Europa.


Ningún partido (democrático) europeo ha hecho algo parecido. Nadie se ha atrevido a expulsar del juego institucional democrático a unos diez millones de votos, que es lo que representa, aproximadamente, el partido popular. El Presidente Rodriguez ha preferido ir del brazo de partidos independentistas antiespañoles. Lo nunca visto en Europa. Me refiero a sistemas democráticos. Tampoco es de extrañar porque la patria del Presidente Rodriguez no es España, es la libertad. Ningún Presidente democrático de Euopa (y diría que no democrático) se ha atrevido a decir una tontería como esta.


Lo dicho, la sorpresa no está en Rodriguez. Seguirá hablando con los asesinos antes que con los representantes del partido popular, a los que desprecia porque les considera los herederos del franquismo. Y los titiriteros y las titiriteras seguirán regalando rosas blancas (fétidas) a sus sectarios amigos, pero no las han depositado en las tumbas de los asesinados por la banda de asesinos. No sólo eso, algunos de estos titiriteros han dicho que ETA es más democrática que el partido popular. ¡Qué majos son! ¡Son progres!


Descartado que el Presidente (calificado por Felipe González como 'loco', lo que se publicó en este mismo periódico) se comporte como un demócrata responsable, queda las ciudadanía. Me pregunto si un país sano, una ciudadanía sana, podría permencer impasible ante las mentiras antes citadas (y encima en asuntos tan graves) del Presidente. Mi esperanza es que no toda la ciudadanía esté anestesiada. Afortunadamente, no toda la ciudadanía es como Boris Eyzaguirre, Miguel Bosé, Almodóvar (que dijo que el PP iba a dar un golpe de Estado) y los titiritereos y titiriteras que vitorean al actual régimen, como las folklóricas vitoreaban a Franco.

Si la anestesia no cede (y la LOGSE y la LOE facilitan la mediocridad colectiva) nos convertiremos en una confederación de pequeños estados que se miran el ombligo. Naciones y realidades nacionales que se verán incapaces de afrontar los retos de una sociedad globalizada, retos que ya resultan excesivos, incluso, para los grandes estados nacionales. La insolidaridad entre las 17 Autonomías (ahora Naciones, Realidades Nacionales u otro título más pomposo) ya se ha manifestado en el grave problema del agua. Se prefiere que el agua se pierda en el mar antes que transferirla a otras Autonomías (ahora Naciones) y esto es sólo el principio. El problema de los incendios forestales será (ya se ha demostrado) más complicado de resolver porque no hay apenas un poder central que pueda dirigir a los distintos Imperios. ¡¡Están invadiendo mis competencias!! Es como si un jefe de bomberos no pudiera mandar a sus bomberos porque cada uno se considerase un jefe. ¡Aquí todos somos jefes! ¡Consensuemos lo que hay que hacer! Y el incendio sigue, porque es de derechas.

Por si faltara algo, la inmigración ilegal, el reagrupamiento familiar, y el paulatino colapso de las prestaciones sociales (principalmente en educación y sanidad) facilitan la crispación. ¡Y eso que la economía va bien! Por ahora.

Piénselo.


Sebastián Urbina.