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jueves, 2 de noviembre de 2006

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Leo (Qué (periódico gratuito)/26/9/2006 )

MÁS DE LA MITAD DE LOS BALEARES NO LEE NUNCA O CASI NUNCA. Responsables de Cort y el Gremi de Llibreters de Mallorca confirman esta falta de interés por la literatura. La red de bibliotecas municipales de Palma sólo prestó 30.431 libros durante el año pasado ...

A partir de los 14 años, muchos niños sólo leen lo que les obligan en el colegio. Así de contundente se muestra Pau Taura, vicepresidente del Gremi de Llibreters de Mallorca.




Título de la noticia: El empobrecimiento más empobrecedor.




Decía Kant, en 'Los eternos interrogantes de la filosofía' que su ámbito se reduce a estas cuestiones: 1. ¿Qué puedo saber?, a la que responde la metafísica. 2. ¿Qué debo hacer?, a la que responde la moral. 3. ¿Qué puedo esperar?, a la que responde la religión. 4. ¿Qué es el hombre?, a la que responde la antropología, aunque, en el fondo, todo se reconduce a la antropología.

Decía, el gran pensador, que nadie puede nombrarse filósofo si no sabe filosofar, pero no se aprende a filosofar sino por el ejercicio y el uso de la propia razón. Y yo, aprendiz de filósofo, pregunto, ¿cómo podrán los que no leen nunca, aprender a hacer un buen uso de su razón? Cuando hablo de filosofía, no me estoy refiriendo a una élite filosófico-intelectual sino a las personas que pretender seguir el principio de la Ilustración ¡Atrévete a pensar por tí mismo!

Alguien que no lee nunca (y ha tenido la oportunidad de hacerlo) podría afirmar que 'piensa por sí mismo', y sería cierto. Lo que pasa es que su razón será más pobre. Pondré un ejemplo. Supongamos que dos personas se encuentran en un camino mientras están corriendo. Una de ellas ha seguido, desde hace tiempo, un adecuado plan de entrenamiento; la otra, ha decidido salir, hoy, a correr. Al cabo de poco tiempo, este último afloja el ritmo porque no puede más. Quiere seguir corriendo, pero no puede.

Algo parecido le sucede al que nunca lee y reflexiona de forma sistemática. Aunque quiera razonar le faltará preparación. Le faltará el input adecuado, le faltará gasolina intelectual. No podrá llegar muy lejos. Esto no significa que no pueda hacer dinero. Pero incluso los 'hombres que se han hecho a sí mismos', si tienen hijos, prefieren que estudien y no repitan su propia experiencia. Creen que estudiando, sus hijos estarán en mejores condiciones para adminsitrar los millones que él ganó. Aparte de que, sin menospreciar el dinero, hay satisfacciones que el dinero no puede conseguir. El amor, la amistad o el goce intelectual de aprender.

Recordemos, finalmente, que una de las tareas centrales de la filosofía es analizar críticamente las creencias de sentido común. Por eso el buen y auténtico filósofo, como Sócrates, puede tener problemas. No, en cambio, el pseudo-filósofo-burócrata, que vende su 'alma' por un plato de lentejas. Y gambas, naturalmente.


Sebastián Urbina.

PD.
El 25% de las bajas de los profesores se debe a causas psicológicas.

Pregunta ¿el desprecio o la violencia de una parte de los alumnos hacia sus profesores estará relacionado con la poca o nula afición por aprender y leer?
Otra pregunta ¿no estará, también, relacionada con la actitud agresiva y grosera de un sector de padres hacia los profesores de sus hijos?

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