13/9/2007.
EDUCACIÓN SOCIALISTA.
El Presidente Nicolás Sarkozy (el rojerío lo llama 'Karkozy'; adviertan la sutileza progre) ha enviado una carta a 85.000 docentes franceses, en la que explica, de forma pormenorizada, sus planes, así como las medidas que adoptará para el 'renacimiento educativo de Francia'. O sea, estimular el mérito, el cumplimiento del deber y la excelencia, tanto de profesores como de alumnos.
Pero aquí somos progresistas. Gracias a la Ministra Cabrera se podrá pasar curso con cuatro suspensos. ¡No hay que crear traumas!¡Abajo el esfuerzo!¡Todos somos iguales!
Pero no es lo mismo la igualdad ante la ley y la igualdad de oportunidades que tratar de conseguir la 'igualdad material', viejo y caduco sueño del rojerío jurásico. Así pues ¡Qué nadie destaque! ¡Crearemos desigualdad!
Pero la demagógica medida de la Ministra Cabrera parece no estar saliendo bien. Incluso los estudiantes, supuestos ''beneficiarios'' de la medida, han dicho que ''favorece a una sociedad de borregos donde se premia al más vago''. ¿Será este su objetivo? Con intensas dosis de Educación para la Ciudadanía, eso sí.
Si los padres no se preocupan en serio, esta tropa moldeará sus hijos a imagen y semejanza de nuestro amado Presidente Rodriguez. ¿Le gustaría?
Sebastián Urbina.
¡Cómo me alegra que nuestros estudiantes hayan hecho esas declaraciones!
ResponderEliminarCon lo proclive que es la juventud a parecerse a sus ídolos, ahora albergo la esperanza de que Zapatero no sea el suyo. No quieren ser "bobos solemnes", por lo visto...
Creo que eres la vecina del quinto. Si es así, me gustaría que anunciaras mi último libro 'La tentación de la ignorancia' en tu pagina. ¡A ver si vendo algún libro en Madrid!
ResponderEliminarLa comisión es excitante. Un café y media copita de orujo por cada diez libros vendidos. ¡Me estoy pasando, lo sé!
Como, además de anunciarlo, me gustaría poder recomendarlo, iré a comprarlo en cuanto envíe este comentario.
ResponderEliminarLa comisión es muy tentadora. Espero que no venda más de cien unidades en un sólo día. Acabaría mareada y de los nervios.