Va por ti y por tu clan, autócrata (que te lo resuma alguien, ya sabemos que no aguantas un párrafo entero): reconstruiremos España.
Otra vez. Se levantará la libertad postrada.
Que seas tan insignificante lo hace todo más doloroso. Verte a ti alanceándonos con Puigdemont no es ni siquiera motivo de compasión, solo de burla. Lo sé. ¿Cuándo y cómo te nos subiste al hombro? Deja, era retórica, lo recuerdo bien.
Sigo lamentando que no te largaran de un manotazo electoral, pero una cosa te reconozco, señor del odio: más de siete millones de votantes acudieron a las urnas como hinchas, enfundados en camisetas de rencor con tu cara.
(Juan Carlos Girauta/El Debate/2/6/2025.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario