Gómez quiere aplicar un impuesto sobre los depósitos
Los socialistas madrileños proponen esquilmar a los más ricos
Culpa de la crisis a los mismos bancos que rescató Zapatero
Los socialistas madrileños han dado con la pócima mágica para salir de la crisis: freír a impuestos a la gran banca. El secretario general del PSM, Tomás Gómez, -ese humilde socialista que criticaba al PP subido a una carísima Harley Davidson- apostó por aplicar a los bancos una tasa de "responsabilidad financiera" para incrementar la recaudación del Estado y así poder contribuir a la salida de la crisis. ¿Bajar impuestos no era de izquierdas?
Preguntado por las declaraciones de la vicepresidenta económica del Gobierno central, Elena Salgado, quien ayer admitió que "quizá" fue un "error" haber suprimido el impuesto de patrimonio, Gómez dijo que si lo que hace falta son ingresos para el Estado, "se podría abrir el debate de por qué no incorporar una tasa de responsabilidad financiera, una tasa a los bancos, que son los que han causado esta crisis y los que se han llevado recursos públicos".
En su opinión, muchos ciudadanos verían "razonable" que los bancos "aporten de una forma transitoria y también económicamente para poder superar esta crisis".
Así, respecto a la alusión de Salgado se limitó a preguntarse "qué opinará el presidente de Gobierno", José Luis Rodriguez Zapatero, sobre esta cuestión, pues la eliminación del impuesto de Patrimonio "es una decisión que tomó él".
Gómez reconoció además que, en su día, los socialistas madrileños se pronunciaron a favor de eliminar este impuesto porque "recaía sobre trabajadores y sobre las clases medias, no sobre las clases altas". "La gente que tiene mucho patrimonio no lo tiene a su nombre sino al de sociedades", explicó.(PD)
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LAS GRANDES MENTIRAS SOCIALISTAS.
De fracaso en fracaso. Primero no había crisis. Era de antipatriotas decirlo. Tiempo después se habló de suave 'desaceleración'. Después se culpó a la falta de 'desregulación en los mercados', lo que es más falso que los propios socialistas. Luego vino la guinda en forma de debate televisivo. En realidad hubo dos. Dejaremos las mentiras de Zapatero y nos centraremos en las de Solbes. El Ministro socialista mintió como bellaco frente al honesto y competente Manuel Pizarro. Este último, con independencia de sus notables éxitos en Endesa (a pesar del gobierno socialista) dijo las cosas que luego sucedieron. Por contra, Solbes mintió y mintió. Especialidad de la casa. De la casa socialista.
Pero esto ya lo sabemos. Lo que nos cuesta creer es que haya tantos millones de ciudadanos cenizos (o sea 'progresistas') que les da igual que les mientan. Y no se trata, una vez más, de que Rajoy sea dechado de virtudes. No lo es y no me gusta. Su oposición es débil y pacata frente a esta cuadrilla de peligrosos irresponsables que llevan a España a la ruina. Se trata de que en la vida, con mucha frecuencia, no podemos elegir entre lo bueno y lo malo. Rajoy es más decente, más preparado y la política económica que anuncia más sensata para salir de la crisis. Más en la línea de algunos socialistas inteligentes y honestos (que también los hay) como Almunia y Fernández Ordóñez.
Por cierto, recordemos que las sensatas propuestas económicas del Gobernador del Banco de España, el socialista citado, fueron contestadas por uno de los altos dirigentes de UGT, conminándole a que se fuera 'a su puta casa'.
Por cierto, esto se comentó (en su momento) en el programa 'El gato al agua' de InterEconomía. Estaba entre los contertulios el catedrático de Economia Antonio Carmona. Una persona inteligente, culta y con capacidad dialéctica contrastada. Eso sí, con un grado de sectarismo enfermizo. Se le preguntó por estas declaraciones y su contestación fue que conocía al alto dirigente sindicalistas que había pronunciado tan poéticas palabras. Su resumen, aunque no aplaudió expresamente, fue: 'Le conozco y es una bellísima persona'.
Viven y hacen malvivir a los demás con la malsana dialéctica de 'ricos y pobres'. Ellos están para esquilmar a los ricos (la derecha, puaf) para dárselo a los pobres. Éstos, en agradecimiento, les votarán. ¡Malditos ricos! El rico lo es porque ha explotado al pobre. De ahí que sea legítimo esquilmarle. Cualquiera que no sea idiota entenderá que esto no anima a trabajar. O sea, más despilfarro, más gasto público, más subvenciones y más demagogia. Todo para mantenerse en el poder. Aunque nos lleven a la ruina. Como ya hicieron en los noventa Felipe González y Solbes. ¿Se acuerdan? ¡Claro que no!
Pero ¿cuáles son las principales causas de tanta pobreza en el mundo? Básicamente las ideas socialistas, las ideas estatalistas, las ideas intervencionistas, tan del gusto de la izquierda. ¿Por qué será que China está saliendo, de forma espectacular, de la pobreza, a pesar del Partido Comunista? Por su liberalización de la economía. Algo parecido a lo que secede en la India. Pero mienten y falsean la realidad. Y, lo malo, es que hay mucha gente que les cree.
Por si les apetece, lean, por ejemplo: 'La economía no miente', de G. Sorman; o 'En defensa del capitalismo global', de J. Norberg. Claro que podría hacerles dudar de los dogmas de la izquierda. ¡Sería terrible! Pues nada, siga tragando.
Este es el personal que nos gobierna. Pero sarna con gusto no pica. Algo parecido a lo que sucede en el Oasis. Ha habido una nevada con fuertes y negativos efectos. Pues bien, la culpa ha sido de las eléctricas, del servicio meteorológico, de las conexiones con Francia y, últimamente, (según el rojo de IU, Saura) de la época de Franco. Que hasta ahora llegan las maldades de don Francisco. Y la gente traga. Pues adelante. ¡Vótenles! Y tírense bolitas de nieve. Nieve catalana, por supuesto.
Sebastián Urbina.
Su tono sobrepasa la barrera de lo antidemocrático. En este país hay unas reglas de juego entre los partidos, que algunos no dudan en soslayar y pisotear. La derecha, anclada todavía en el 2004, lleva gran ventaja en ese campo.
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