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miércoles, 10 de abril de 2013

CARADURAS. CAT











 CARADURAS. CAT


 La Generalitat se jacta de que tan sólo 17 familias han solicitado una educación en la que el castellano sea también lengua vehicular en la enseñanza. El curso pasado hubo 106 peticiones. La complejidad del proceso administrativo y judicial y los incumplimientos del Govern, que ha cerrado los ojos ante las sentencias del Tribunal Supremo a favor del bilingüismo, han frenado el goteo de escolarizaciones en castellano.

«Hay que ser un auténtico héroe», señala la diputada autonómica popular María José García Cuevas, en referencia a las familias que se adentran en un proceso administrativo y judicial, que a veces se hace eterno, para lograr que el castellano sea lengua vehicular en la educación de sus hijos. Según la portavoz del PP en el Parlament, la Generalitat «se muestra insensible» hacia aquellos que quieren el español en igualdad de condiciones que el catalán en las escuelas, y denuncia los reiterados incumplimientos judiciales por parte del Ejecutivo de Artur Mas
.(E-Pésimo-Auxiliar 1)




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La Generalitat catalana deberá aplicar el bilingüismo en una clase cuando un solo alumno lo pida. Así lo establecen diez autos del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) dictados entre el 6 y 14 de marzo de este año, en los que se corroboran las medidas cautelares de diferentes autos de los meses de enero y febrero en los que el alto tribunal catalán ya había requerido a la administración autonómica aplicar el bilingüismo en los casos autorizados por la justicia. 

Los fallos, todos idénticos y a los que ha tenido acceso ABC, no cuestionan la inmersión, aunque sí recuerdan a la Generalitat que no existe el derecho a recibir enseñanza en una sola lengua (el sistema educativo catalán solo utiliza el catalán). 

El alto tribunal catalán rechaza en sus resoluciones los recursos de reposición interpuestos por los diez padres contra las medidas cautelares dictadas en enero de este año por este mismo tribunal, que limitaban el derecho a escolarización bilingüe a sus hijos, y, aunque, desestima extender el derecho de sus hijos a todos los alumnos del sistema educativo, admite, sin embargo, que cuando un alumno pide clases en castellano y catalán "el sistema ha de adaptarse a toda la clase (o unidad escolar) de la que forma parte ese alumno". 
 
En sus fundamentos de derecho, el TSJC expone explícitamente que "lo acordado afecta al alumno juntamente con sus compañeros". Convivencia Cívica Catalana (CCC) celebra los nuevos pronunciamientos judiciales, que interpreta como "una victoria de la enseñanza bilingüe en Cataluña" y reclama a la Generalitat que "ejecute ese mismo curso" las medidas cautelares dictadas por la justicia catalana. 

Según CCC, estos diez autos aluden a 14 alumnos y a un total de 10 centros de toda Cataluña. Así, en base a lo expuesto por los autos, la entidad entiende que "si se extiende el derecho a escolarización bilingüe a las respectivas clases de estos alumnos" la Generalitat debe ofrecer enseñanza en las dos lenguas oficiales a un total de 300 alumnos. Francisco Caja, presidente de Convivencia Cívica, indica a este diario que "si a estas 10 familias se suman las otras nueve a las que se les ha reconocido el derecho son unos 500 niños los que deben recibir enseñanza bilingüe". (ABC)

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