(No es posible que Cataluña vaya bien. Todas las sociedades tienen un cupo de gilipollas, con pequeñas variaciones.
Sin embargo, cuando alguna sociedad- que es superior a todas por derecho divino- alcanza tan altos niveles de gilipollez/fanatismo, no puede ir bien.
Es como tomar un café con una cucharadita de azúcar. Vale. Pero si pone diez cucharadas de azúcar, la cosa cambia. Ya no es café.
Cataluña- no todos, dado que hay héroes y heroínas- es una sociedad enferma de indentidad. Lo siento, pero no saldrá nada bueno de esta porquería supremacista.)
Cataluña
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