Bailando con penes
A Francina Armengol le ha dado por la educación sexual de los niños de cero a seis años. La medida estrella es que la popular canción infantil 'En Joan Petit' será ampliada. Para mis lectores peninsulares: 'En Joan Petit' es una canción de toda la vida donde el niño protagonista va bailando sucesivamente con diversas partes del cuerpo: el dedo, la mano, el codo…
Pues bien, la Consejería de Educación anuncia ufana que ya dispone del manual titulado 'Con todos los sentidos' ('Amb tots el sentits', en pancatalán), elaborado a modo de libro de texto por tres sedicentes expertas en salud pública. Detengámonos en algunas perlas destacadas.
“Los niños y niñas (sic) se han de entender como seres sexuales y deben percibir su propio cuerpo en totalidad. Y nombrar o tratar sus diversas partes sin que sea algo vergonzoso, de la misma manera que hablan de la oreja o el pie”, explican. Para ello han decidido adaptar la popular canción de Joan Petit, que, a partir del propio curso, también bailará con el pene o la vulva, nada de eufemismos.” (Diario de Mallorca)
Les enlazo aquí la tradicional canción, para quien no la conozca. Podrán ver que la gracia es ir mostrando la parte del cuerpo que corresponde en cada momento. Será muy interesante, primero, ver cómo meten el ‘penis’ y la vulva en la letra de la canción. Lo he intentado con mis hijos y no queda nada bien, lo único sería decir “amb so pit, pit, pit”, pero las ‘expertas’ no quieren eufemismos. (Por cierto, no hay manera de encontrar la canción en ‘bon mallorquí’, diciendo “amb so dit, dit, dit”, como toda la vida. Sólo con el pancatalán ‘article lalat’. Y eso que una canción infantil no podrán decir que es un registro formal que sólo admite pancatalán y no mallorquín, dialecto ignominioso que, según sus ‘expertos’, no puede escribirse. Se conoce que ya está consumado el adoctrinamiento separatista, así que pasamos al sexual-genérico).
En cualquier caso, será muy interesante ver al corro de niños mostrando sus penes, ¿o al menos haciendo el ademán? Pero si es una parte del cuerpo como cualquier otra, ¿por qué no mostrarla? ¡Qué mejor modo de acabar con la vergüenza!
Otra dificultad que se nos ocurre es que Joan Petit (Juan Pequeño) muestre su vulva. Sin duda se trata de un precoz niño ‘trans’, ¿o es que es hermafrodita, y puede mostrar genitales de ambos sexos? Quizás debería pasar a ser Ne Joane. En fin, ‘ja en sortirem’, que decimos por aquí. Sigamos.
“Para que aprendan cómo se reproduce el ser humano, también se harán juegos de simulación para que aprendan cómo se hace”. ¡Hombre, magnífica idea! ¡Pero esto ya lo pensaron los Monty Python! Mentes preclaras… Al menos, en su sketch los alumnos van de chaqueta y corbata y se ponen en pie al entrar el profesor —¡o su esposa! (Ahora ya no dará la clase práctica con su esposa, menudo anacronismo). Ya ven qué cosas, los genios del humor absurdo ahora son modelo e inspiración de gobernantes.
“También se les enseñará en estos tiempos de biodiversidad cultural que hay muchos tipos de culturas y familias y que ser diferentes no implica ni mucho menos ser peor.” Por supuesto, no dejemos pasar esta ocasión sin incluir un poco de homosexualismo, pues a eso se refieren cuando hablan de tipos de familia. Por algo ya no hay película de Disney sin familia’ gay. Nuestros líderes no inventan nada, sólo se suben al carro.
Extraigamos las conclusiones: bajo la fachada de la preocupación por los derechos y el bienestar infantil, sólo hay algunas ideas que se pretende imponer globalmente: promiscuidad, homosexualidad, aborto. Es lo que anunció “Un mundo feliz”. Ya saben, las distopías de Orwell y Huxley son ahora el manual de instrucciones. Y la cosa va viento en popa (para la distopía).
La edad media de iniciación sexual se situaría en los 13,8 años de edad según algún estudio. ¡La media! (Aunque no inspira mucha confianza, porque estos estudios son como las encuestas electorales: más que explicar la realidad pretenden orientarla). Según otro estudio, “el porcentaje de mujeres jóvenes que siente atracción sólo por el otro sexo ha pasado del 69,4 por ciento en 2016 al 48,5 por ciento en 2021”.
La llamada ‘educación sexual’ no es neutral: es una apenas disimulada incitación a mantener relaciones sexuales de distintos tipos. No se explica por qué algunos pensamos que el sexo cobra sentido en el matrimonio, en uno para toda la vida. No se explica la fidelidad, la castidad, el pudor. Sólo una visión materialista y banal del sexo: mera gimnasia que da gustico. Normal que no dé tiempo a estudiar la regla de tres ni la historia de España antes de 1812: lo primero es lo primero. Y lo primero es producir jóvenes infantilizados, aislados, manipulables, y que se reproduzcan poco.
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