En estas circunstancias -dado que el Gobierno carece de la dignidad y altura moral para rendir como merecen tributo a las víctimas del terrorismo etarra-, lo más digno que podría hacer el Ejecutivo socialcomunista es reconocer su cobardía, pero no lo hará.
Tragaderas tiene de sobra para permitirse la vileza de enviar la Real Orden de Reconocimiento a las Víctimas del Terrorismo por correo, acompañada de una breve carta que reza lo que sigue: «Me complace enviarle la medalla correspondiente a la insignia de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo que le ha sido concedida, con la que la sociedad española rinde testimonio de honor y memoria a todos aquellos que han padecido directamente la violencia terrorista».
(OkDiario/3/11/2020.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario