jueves, 4 de febrero de 2010

NO SOMOS IGUALES.

Redacción | Publicado el 3 Febrero, 2010 | (MD)

«He visto numerosos emigrantes filipinos aceptar el islam bajo presión laboral», denuncia en la agencia AsiaNews la enfermera filipina Joselyn Cabrera, que trabaja en el hospital de Riyadh. «Unos meses después de contratarte, tus jefes te dan un ultimátum y te dicen que has de convertirte al islam para conservar tu empleo. Es una elección muy dura», explica. Joselyn ha visto al menos cincuenta casos de conversiones por presiones en el trabajo. «Incluso a mí me han presionado mis compañeros musulmanes, pero yo siempre les he dicho que permaneceré católica. Hasta ahora no me ha pasado nada», añade.

Según la administración filipina del empleo (POEA), la emigración filipina hacia Oriente Medio ha crecido el 29.5 por ciento entre 2007 y 2008 a pesar de las condiciones de trabajo horribles que incluyen la posibilidad de la conversión y de los abusos sexuales en el caso de las mujeres.

El caso más reciente implica a una mujer que fue violada en el trabajo. Debido al incidente, las autoridades de Arabía Saudí la acusaron de sexo extraconyugal ilegal y la encarcelaron el 11 de septiembre en el capital. Como resultado de la violación, quedó embarazada, pero perdió el bebe debido a condiciones infrahumanas de la prisión.

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NO SOMOS IGUALES.


A pesar de las idioteces de Zapatero y su Alianza de Civilizaciones, no somos iguales. Afortunadamente. Pero una cosa es comportanos como los sauditas con los inmigrantes, lo que no podemos ni debemos hacer, y otra cosa es tener complejos estúpidos, como esta alcaldesa socialista de Cunit, que apoyó a un imán en contra de una musulmana que no llevaba velo. Y aconsejó a esta mujer que no creara problemas. ¡Encima! O sea, los socialistas (porque no se les ha oído protestar) critican a los que ejercen su legítima libertad. Y apoyan a los verdugos.

Es lo que hacen en el osasis catalán con la lengua española. Aunque no apoyan, en este caso, a los verdugos. Ellos lo hacen con mucho gusto. Porque no les gusta la libertad. La ajena se entiende. Socialismo, si señor.

El rojerío, en general, no tiene inconveniente en bajarse los pantalones ante los islamistas, pero adopta posiciones críticas (por ser suave) con los católicos. Es un motivo más para desconfiar de la izquierda. Recordemos la guarrada ofensiva de los socialistas extremeños con la exposición fotográfica en la que la Virgen María hacía una paja a Jesucristo. ¡Qué majos los socialistas!

Es cierto, no toda la izquierda es igual de guarra. Pero la que no es igual debe dejarse oir. No se le oye criticar estos desmanes. Sucede algo parecido con los 'islamistas moderados'. Yo quiero creer que los hay, pero sería conveniente que se manifestarán alguna vez. En defensa de la libertad y en contra del terrorismo. Después de un atentado, por ejemplo. Que se vea que existen.

En resumen, los ciudadanos (o sea, no las ovejas) deben saber que no pueden confiar en los socialistas. Apoyarán a los mususlmanes antes que a los españoles, si hay un conflicto. En cuanto al PP, mientras lo lidere Rajoy se hará algo parecido. Seguramente no será tan miserable como esta alcaldesa socialista, pero no levantará mucho la voz. No tiene agallas políticas para afrontar con claridad y firmeza las grandes cuestiones. Esta es una. Otra es el anticonstitucional estatuto de Cataluña; o la energía nuclear, etcétera. Es de pena.

¡Zapatero dimisión! ¡Rajoy a casa! A la tuya, por supuesto.


Sebastián Urbina.

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