(Los partidos tradicionales llevan años haciendo lo políticamente correcto. O sea, descontrol con la inmigración ilegal. Pero se les ha ido de las manos.
Durante unos años ha funcionado llamar 'racista' o 'xenófobo' al que no estaba de acuerdo con ellos. Pero, ahora, ya hay mucha gente que está demasiado cansada y asustada de este descontrol. Ven el peligro. Se dan cuenta de que los políticos están desbordados y tienen miedo. Han dicho 'basta'. Empezó el húngaro Orban, al que insultaron de todas las maneras. Otros se han sumado.
Irá a más.)
NO SE ENTERAN.
Cumbre de urgencia
para salvar a Merkel y frenar el populismo italiano.
Buscan una postura
común, con el refuerzo de las fronteras, para salvar la cita oficial del 28 y
29 de junio
Ningún alto funcionario europeo negará que en estos momentos la
Unión atraviesa uno de los momentos más graves. La
crisis migratoria ha afectado a lo que sería el equivalente al sistema nervioso
central del organismo
comunitario. Nunca antes se había producido una
situación tan grave.
Ni siquiera el Brexit,
que por su propia naturaleza es un fenómeno que se circunscribe a los propios
británicos y que en el fondo había tenido una especie de efecto vacuna. La cumbre extraordinaria de emergencia
convocada para hoy es la prueba más evidente de que las cosas han llegado a un
punto en el que no hay ningún peligro que se pueda descartar, incluyendo los
más graves.
(ABC/Junio/2018.)
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