(Toda persona decente debe anteponer los hechos a la propaganda. Cuando esto no sucede, la persona en cuestión no es creible. No es fiable.
Una rémora para la vida democrática, que no puede sostenerse sobre la base de la mentira. Y si esto sucede, la democracia se desmorona. Ganan los farsantes.)
Lo intentaron con el caso Samuel y les salió el tiro por la culata. Pero la izquierda es incorregible y ahora lo vuelve a intentar con la ‘homotrola’ de la agresión ‘fake’ al joven de Malasaña.
Lo ha recordado
el presidente de Vox, Santiago Abascal, al recordar que los asesinos
del joven Samuel Luiz en La Coruña fueron «una okupa, un militante de
extrema izquierda y un inmigrante». (HECHOS)
En una entrevista en Telecinco, Abascal ha denunciado que la «práctica institucionalizada» de «señalar» a Vox para generar «odio político» contra la formación y sus militantes.
Entre los casos citados, ha incluido el de Samuel Luiz.
(Luis Balcarce/OkDiario/10/9/2021.)
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