Miguel Gil | Actualizado 26/02/2009 13:45h(LaNacion.es)
Mucho más optimista que hace un par de semanas, Núñez Feijóo se muestra convencido de que, aunque es “muy difícil”, puede alcanzar su objetivo: 39 escaños. Minimiza las consecuencias para Rajoy de un mal resultado y reitera que “sólo vale la mayoría absoluta”.
-¿Qué les dicen las encuestas?
-Que podemos ganar con mayoría absoluta las elecciones.
-¿En sintonía con las que vienen publicándose o de forma más holgada?
-De una manera más clara. Las que se han publicado son mejores que las de hace cuatro años, y de ellas se desprenden dos cosas muy importantes: en las del Grupo Prisa se aceptaba que el 60% de los encuestados quiere un cambio de Gobierno y que el 25% aún se muestra indeciso. Todos los sondeos nos dan uno o dos escaños más que hace cuatro años y, por lo tanto, estamos en condiciones de mantener el objetivo de sacar la mayoría suficiente para gobernar, que es la mayoría absoluta.
-¿Le parecen sospechosas las relaciones entre Quintana y el empresario Jacinto Rey? En ‘lanacion.es’ se han publicado unas fotos de ambos en una envidiable embarcación…
-Los documentos gráficos tienen su importancia, aunque yo no tengo absolutamente nada en contra de los empresarios. Lo que sí tendrá que explicar el vicepresidente, como el ex ministro de Justicia, son sus adjudicaciones a este empresario. Los gallegos se merecen una respuesta.
-¿Cómo se explica que el 15% del censo pueda votar sin pasar por una urna?
-Responde a un interés político del PSOE. Ha invertido mucho tiempo y dinero y ha hecho alianzas electorales en los países donde residen la mayor parte de los gallegos en el exterior (Argentina y Uruguay). Ha utilizado embajadas y ha abierto oficinas con diputados y diputadas del PSOE. Les interesa un voto opaco de la emigración donde no se pueda garantizar ni el que vota ni a quién vota.
-Las encuestas apuntan un vuelco hacia el PSOE en la intención del voto de los gallegos en el extranjero. ¿Casualidad?
-No, es un trabajo de orfebrería muy bien hecho. Son centenares de agentes electorales que en este momento están patrullando las calles de Buenos Aires, y es un trabajo denunciado por un valiente que se fue a un notario y declaró que un agente del PSOE le ofreció 45 euros por su voto y el de su hijo. Las actas están a disposición de cualquier medio de comunicación que las quiera.
-¿Cree que es un caso aislado?
-Es evidente que no es el único entre las miles de personas que trabajan en Buenos Aires. El mismo agente electoral ofertaría a todos lo mismo. En Galicia todavía hay un juicio pendiente contra un alcalde, una diputada, el secretario general de Emigración -dependiendo directamente del presidente-, y un consejero. Todos están implicados en el pago con fondos públicos de sueldos y de billetes de avión a una agente electoral que quiso declarar que, ya en las generales, se estaba pagando a los agentes electorales en Buenos Aires durante dos meses mediante subvenciones de la Consejería de Trabajo y con billetes facilitados por el secretario general de Emigración.
La información completa se puede leer en el número de esta semana de la revista Época, a la venta en los quisocos a partir del viernes.
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