viernes, 2 de mayo de 2014

RAJOY, UN POLÍTICO FRACASADO

 
 
 
 
 
 
 
(No necesito que lo diga 'The Economist'.  Pero es un alivio, dentro de la desgracia, que este prestigioso semanario británico repita lo que aquí, y en otros sitios, se viene diciendo.
 

Rajoy es un político capaz para situaciones de normalidad. Pero en situaciones graves, como las actuales, no sirve. Hay marinos de agua dulce y marinos de aguas bravas. Rajoy no es un Hombre de Estado y no sabe gestionar la grave situación que vive España. 
 
 Y de ello se aprovechan los despreciables separatistas. Y algún otro.
 
Y Cataluña vive una situación de confrontación. Lo sabemos, aunque haya gente que prefiere ocultarlo.
 
 
PD. Es terrible que la oposición sea, incluso, peor. Pero quedan UPyD, Ciudadanos y VOX. No lo olvide.)
 
 
 
 
 RAJOY, UN POLÍTICO FRACASADO.
 
 
 
Ve "señales preocupantes" de confrontación.
 
'The Economist': Mas ha perdido el control de su plan secesionista.
 
"Mas está siendo empujado por fuerzas que están más allá de su control", como ERC y la ANC, 

 que "amenaza con la desobediencia civil y con una declaración unilateral de independencia", alerta el semanario británico

También considera que el Gobierno "está fracasando a la hora de gestionar" el problema.

2 comentarios:

Arcoiris dijo...

Se empezó redactando la Constitución y la legislación electoral de manera que los separatistas tuvieran el camino trillado para ganar y ejercer el poder, es decir, controlar las competencias exclusivas sobre educación y propaganda más las restantes menudencias. Sin importar que fueran minorías demográficas y con el aplauso de nuestros sucesivos gobiernos. Si la circunstancia de que esas actuales comunidades autonómicas conocieron tiempos históricos mejores, si la condición de íncolas, de nativos de determinadas tierras, les confiere el derecho de gobernar su territorio, ¿qué hacen, por ejemplo, los amerindios en sus reservas? ¿Porqué no están en la Casa Blanca? O bien, ¿habrá que rebobinar la historia para que hasta el Alguer, pongamos por caso, vuelva al redil de la corona aragonesa?
En definitiva, pasando por la tolerancia con los pitos a los símbolos nacionales en los acontecimientos multitudinarios, las quemas de banderas y efigies de altas personalidades, las votaciones por la independencia en distintos municipios, el repetido desacato de las sentencias de nuestros tribunales de justicia… así, pues, se ha llegado a la actual situación que nos lleva a plantearnos si nuestros gobiernos y partidos políticos están realmente al servicio de España o son, en cambio, meros topos subordinados a los separatistas. ¿Llegará el momento en que pongan pies en pared? Sinceramente, no lo acabo de creer.

Sebastián Urbina dijo...

Pues si no lo hacen, terminaremos como en los Balkanes. Versión española. Pero, si llegamos a esto, no será gratis.