¿Hemos aprendido algo?
Durante unos cuarenta años, las fuerzas políticas supuestamente nacionales, PP y PSOE, hicieron concesiones- de todo tipo- a los antes llamados ‘nacionalistas periféricos’.
Eran los años en que ser nacionalista periférico era progresista. Teníamos que mimarlos porque habían sufrido mucho. Franco había sido durísimo con ellos y, ahora, teníamos que recompensarles. La Transición fue un esfuerzo de todos, para que las reformas políticas siguieran adelante y alcanzásemos la deseada democracia, después de un régimen autoritario de cuarenta años. Todos cedieron, menos los nacionalistas periféricos.
La estupidez de los principales dirigentes- centralmente PP/PSOE- permitió un inacabable rosario de cesiones y concesiones, supuestamente, para alcanzar la gobernabilidad de España. Un proyecto común.
La injusta ley electoral permitía que los nacionalistas periféricos alcanzaran un poder político injustificado, dados sus votos. Un ejemplo. En las elecciones generales de 2008, el PNV obtuvo 300.000 votos y UPyD, 303.000 votos. Pues bien, el PNV obtuvo seis diputados y UPyD, uno. O sea, más poder a los enemigos declarados de España. ¡Hay que ser tonto de verdad!
La excusa habitual era que el PNV se concentraba solamente en el País Vasco y UPyD en toda España. Esto, a cualquier demócrata, no le debería impresionar. ¿Por qué? Porque en una democracia digna de este nombre, el principio fundamental es el de ‘un hombre, un voto’. Tranquilas, incluye a las mujeres. Una democrática ley electoral debe acercarse lo más posible a este principio fundamental.
Esta ley electoral, que ni PP ni PSOE han querido cambiar (¡qué irresponsables!), favorece a los separatistas antiespañoles (antes nacionalistas periféricos), que utilizan esta injusta ley para tener más poder y competencias. Y la utilizan para romper España. Para dar un golpe de Estado. ¡Y proclaman públicamente que lo volverán a hacer! Pero el peligro es Vox, se rebuzna sin descanso. El pro-golpista Aragonès, presidente de la Generalidad, amenaza al Gobierno: "O resuelve el conflicto con Cataluña o se abre paso a la extrema derecha". El nivel de aborregamiento, manipulación y desfachatez es muy preocupante. ¿Te enteras, Pablo? Porque Díaz Ayuso sí se entera.
¿Se imaginan a un presidente de gobierno de cualquier país europeo negociando, de tú a tú, con un admirador público y notorio de golpistas? ¿O teniendo socios de gobierno comunistas, golpistas y herederos políticos de una banda terrorista? ¿Cree usted que hay algún país tan políticamente indecente y acomplejado?
Todos sabemos que España sufre una pandemia de coronavirus. Una fecha de referencia es la manifestación feminista del 8/M/2020. En diciembre 2021, Yolanda Díaz confirmó que conocía la gravedad del Covid, y avisó. Nada. Encima, la Unión Europea desaconsejó autorizar "multitudes" seis días antes del 8-M, para evitar transmitir el coronavirus. El Gobierno desoyó esta recomendación europea. Resumiendo, el gobierno social-comunista prefirió mantener la manifestación feminista antes que evitar más contagios y muertes por coronavirus. ‘El machismo mata más que el virus’ dijeron las feministas, con su típica objetividad. ¡A tragar!
La situación fue empeorando desde el citado 8-M, y el gobierno, por Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, declaró el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19. Como medida extraordinaria - entre otras- ordenaba la limitación de los movimientos de los ciudadanos en todo el territorio nacional, lo cual entró en vigor en el momento de la publicación en el BOE, ese mismo día. Los ‘estados de alarma’ han sido declarados inconstitucionales por el Tribunal Constitucional. Tranqui, el peligro es Vox.
El Ejército fue enviado al País Vasco, pero el lendakari Urkullu se quejó al presidente Sánchez y, en 24 horas, el ejército salió del País Vasco.En concreto, se desplegó la Unidad Militar de Emergencias, cerca de Vitoria, pero se marcharon sin realizar ninguna intervención. Es el fracasado Estado Autonómico. Incluso en una situación excepcional- pandemia de coronavirus- y con un estado de alarma, priman los intereses de los separatistas antiespañoles que el interés general. O sea, idiotez suicida.
Para no ser menos, en el Ejecutivo catalán veían una voluntad de invasión competencial en materias transferidas, como Sanidad o Mossos. O sea, un '155 encubierto'. ¡Qué horror! Ni corto ni perezoso, el fraudulento presidente Quim Torra transmitió a Sánchez su “rechazo” al plan del gobierno de España, en una situación dramática, en la que moría gente por coronavirus y con una preocupante falta de medios materiales y humanos. Y con muchos hospitales saturados en los que- según decían los médicos- se veían obligados a tomar decisiones como en tiempos de guerra. O sea, dramático para los mayores de 65 años.
Y, en marzo de 2020, se esperaban días, o semanas, mucho peores. Además, todos los informes de expertos indicaban que una vacuna contra el coronavirus no estaría disponible antes de un año. Con suerte.
En estas dramáticas circunstancias ¿qué hacían los políticos separatistas? Torpedear la unidad de acción y desacreditar a España en el exterior. Deslealtad y odio enfermizo a España. ¡Y son socios del socialista Sánchez! ¿Qué decir de los comunistas, colocados por Sánchez? El vicepresidente Iglesias es un admirador, público y confeso, de dictadores como Fidel Castro y asesinos de masas, como Lenin. ¡Pero Vox es el peligro! , ¿verdad, Pablo?
¿Qué más necesitan los españoles- políticos especialmente- para darse cuenta de que la unidad- no la uniformidad- nos hace más fuertes?
Hemos aprendido algo? El nivel de aborregamiento políticamente correcto es tan alto que un gobierno socialista, apoyado por comunistas, golpistas, y filoetarras es considerado como una verdadera democracia, pero un acuerdo entre PP y Vox sería un peligro para la democracia. Tragar esta desvergonzada idiotez es el resultado de la hegemonía cultural de la izquierda. Pablo, no te enteras o no te quieres enterar. ¿Tiene futuro este PP, acomplejado y centro/centrado?
Pablo, no estorbes. Has insultado, acosado y espiado a Díaz Ayuso (la auténtica líder del actual PP) y has beneficiado- de rebote- a este despreciable gobierno del mentiroso Pedro Sánchez. Jugada perfecta.
(MallorcaDiario.)
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