LA MENTIRA COMO DISCURSO.

 (Durán i Lleida miente con una facilidad pasmosa. No olvidemos que ha repetido, durante décadas, que en Cataluña no había problema lingüístico y que no se discriminaba a nadie. Tal vez siga. No sé, ni me interesa. Por otra parte, no es el único. La mentira forma parte del discurso habitual de los catalanistas.

Lo malo es que Rajoy les da más cancha a los separatistas, como Mas, que a los catalanes que se levantan frente a estos separatistas y rechazan el proceso independentista ilegal.

Si lee estas informaciones verá, una vez más, que en Cataluña hay un clima de confrontación creado por los separatistas catalanes. Entiendo que ellos mientan como bellacos, pero que Mariano y De Guindos...

¿Todavía es votable don Mariano? Yo creo que no. Aunque los separatistas estarían contentos de que Mariano siguiera. O alguien así.

PD. El comentario de que en 'Madrit' disfrutan con la hipotética confrontación en Cataluña, es típica de mentes mezquinas como los catalanistas. Nada nuevo, aunque hay gente que no se quiere enterar.

LA MENTIRA COMO DISCURSO.

El portavoz de CiU en el Congreso y líder de UDC, Josep Antoni Duran, ha defendido este viernes que, si la agresión al primer secretario del PSC, Pere Navarro, respondiese al debate político en Cataluña, sería una excepción.
"Aunque el debate político fuese --como dijo el afectado-- lo que hay detrás de la agresión, no es otra cosa que una excepción que confirma la regla", ha sostenido en su carta web semanal a la militancia recogida por Europa Press.
El dirigente democristiano ha remarcado que todavía se desconocen las causas de la agresión, y ha reclamado no sacar las cosas de contexto: "En Madrid han disfrutado --y no poco-- hablando de un hipotético clima de confrontación social en Cataluña".

 (ld)

Los no nacionalistas, en el punto de mira del independentismo catalán violento.

La sede del PSC de Sant Sadurní d'Anoia amanece con una diana pintada en su puerta.

 En los últimos meses, la intensificación del discurso independentista ha ido acompañada de forma paralela por un incremento de los ataques a las sedes y a los miembros de los partidos no nacionalistas en Cataluña

 (Crónica Global)