CRISIS Y ESTALLIDO.

CONFLICTO/ Podría producirse un aumento de la delincuencia y brotes de racismo La crisis puede provocar un estallido social

mallorcadiario.com

domingo, 09 de noviembre de 2008

PALMA.- El incremento del paro que se va a producir en los próximos meses hace prever un “estallido social” que se puede traducir en manifestaciones, aumento de la delincuencia y brotes de racismo y xenofobia, según el reportaje que publica en el número de este mes la revista Desarrollo. En el tercer trimestre el paro ha aumentando en las Islas hasta un 120 por ciento en relación al pasado año. Según los datos que recoge la publicación una buena parte de estos trabajadores no tendrán derecho a ningún tipo de prestación lo que provocará una crispación social. XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX CRISIS Y ESTALLIDOS. Las crisis económicas no producen, necesariamente, estallidos sociales. De forma parecida, la pobreza severa no produce, necesariamente, terrorismo. Hay países pobres que producen terrorismo y otros, en similares circunstancias, no lo producen. Hay, incluso, naciones o regiones ricas (como el País Vasco) que producen terrorismo. Por tanto, es cierto que una crisis económica favorecerá, probablemente, actitudes y comportamientos delictivos y antisociales. No sabemos, con certeza, si será así y si lo es, en qué medida. En cambio, lo que me parece fundamental es el nivel moral de la mayoría de la población. Si la mayoría ha interiorizado principios de respeto a la dignidad de los demás, será difícil caer en estas actitudes violentas y antisociales. Sin embargo, creo que la sociedad europea, en general, y la española, en particular, sufren un cambio de valores importante. Estos cambios favorecen las reacciones indeseables antes mencionadas. ¿Cuáles son estos valores perniciosos? Probablemente, los siguientes: desprecio (o minusvaloración) del mérito y el esfuerzo, como forma de alcanzar proyectos y objetivos personales; tendencia a acusar a los demás de nuestros fracasos; igualitarismo en los resultados, lo que me permitiría obtener lo mismo que los demás, aunque los demás se lo hayan merecido y yo no. De ahí la importancia de despreciar el mérito;exigencia continuada de derechos a los poderes públicos, lo que supone un aumento del poder de 'papá Estado' y la conversión paulatina de los ciudadanos en menores de edad; rechazo de las obligaciones; rechazo de la disciplina y del concepto de autoridad, lo que repercute negativamente en la educación e, indirectamente, en la sociedad; relativismo sin matices, que suele traducirse en respeto por cualquier cosa. Por ejemplo, sajar el clítoris de las niñas sería una costumbre respetable porque nada es verdad ni es mentira, todo es según el color del cristal con que se mira. Hay más cuestiones a comentar pero creo que bastan las mencionadas para darnos cuenta del serio problema que tenemos. ¡Tendremos que caer más abajo, todavía, para darnos cuenta? Por cierto, recomiendo las propuestas de The Economist para que España salga de la crisis. Sebastián Urbina.