EL ESTADO DE LAS BARONÍAS.

01/02/2009 11:44h(LaNacion.es)

El PP rechazará en las Cortes Generales el nuevo modelo de financiación autonómica del Gobierno si lo mantiene tal y como lo presenta ahora, ya que vulnera la solidaridad territorial y aboca al Estado a un mayor déficit al poner sobre la mesa, según cálculos propios, alrededor de 7.000 millones de euros.

El coordinador de Política Autonómica y Local de los populares, Juan Manuel Moreno, ha negado, en una entrevista con EFE, que el partido esté dividido entre lo que propone la dirección nacional, el rechazo a la reforma que ofrece el Ejecutivo, y algunas comunidades
autónomas como Madrid o Comunidad Valenciana, cuyos presidentes evitaron criticar el planteamiento del Ejecutivo. No existen discrepancias porque el PP no tiene “una propuesta cerrada sobre la que discutir”.

Sin embargo, como destaca Moreno, por lo “poco” que conoce el Partido Popular, la propuesta de reforma del sistema es “inaceptble”. “Primero, porque vulnera el principio de solidaridad; segundo, porque aboca a un modelo inestable que se basa en el déficit público; y tercero porque es una losa para el crecimiento económico”, resume.

Aunque el Gobierno no ha dado cifras precisas, el PP estima a tenor de sus propios cálculos que la reforma del modelo reportará aproximadamente 7.000 millones de euros a las comunidades autónomas, lo que no contenta al partido, pues más que hablar de cuantías, prefiere centrarse en la filosofía de la propuesta.

Y con esa filosofía no coinciden los populares, precisamente por los motivos citados, de modo que, asegura Moreno, “el PP rechazará el modelo en las Cortes Generales si el Gobierno no lo cambia”, en tanto que para la discusión del nuevo sistema en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, otro paso necesario, las comunidades populares esperarán a posibles modificaciones para adoptar una posición definitiva.

Mientras la reforma de la financiación autonómica avanza, el dirigente popular lamenta que el sistema para dotar a los municipios de mayores recursos siga estancado debido a “las promesas incumplidas” del PSOE, que “se ha convertido por méritos propios en el partido con menos sensibilidad municipal”, y al vicepresidente económico, Pedro Solbes.

El PP ni siquiera cree a los socialistas cuando apuntan a la existencia de un proyecto de reforma de la financiación local antes del verano.

Frente a la actitud del Ejecutivo, los populares insistirán en la urgencia de un nuevo sistema que aumente la participación de las corporaciones locales en los gastos del Estado -hasta un 20 por ciento en vez del 13 por ciento actual- y que defina nítidamente su marco competencial, según explica. Asimismo, añade, el PP quiere con el PSOE firmar un “gran pacto local” al que “sería conveniente” se sumaran otros partidos. En definitiva, “hay que cambiar el sistema porque el actual ha llegado al límite de sus posibilidades”, sentencia.

Con la crisis, el agotamiento del modelo es aún más palmario, pues, según señala Moreno, los ayuntamientos han sufrido una caída de sus ingresos de hasta un 35 por ciento, lo que se traduce en un “recorte” de las políticas sociales, sobre todo en las zonas rurales, a donde en ocasiones no llegan ni la administración central ni la autonómica.

Respecto al fondo local de 8.000 millones de euros para generar obra pública, el dirigente del PP califica la medida de “inútil”, ya que no creará empleo estable, y de “disparatada”, pues obliga a un desembolso en carteles de publicidad institucional de 30.000 millones de euros, todo para “comprar la paz social de los ayuntamintos en época electoral”.