Rosalina Moreno | Actualizado el 2/4/2009 - (LaNacion.es)

No espera nada de la cumbre del G-20 y mucho menos de Zapatero. Asegura que este Gobierno no tiene política económica, sino medidas populistas a expensas de ver que la economía mundial prospere para que nos arrastre. Además, Velarde alerta de que la deflación está cerca y afirma que Caja Castilla La Mancha no será única entidad que ha tenido desmanes.

-¿Ha tocado fondo la economía española?

-Es imposible que haya tocado fondo porque aún no se han resuelto ninguno de los problemas que tenía. Por desgracia, todavía nos queda mucho despeñamiento. Estamos en una crisis honda y en una depresión profunda y, por lo tanto, empiezan a reunirse las condiciones para que pueda estar dentro de una situación de deflacion. Esto es peligroso, y encima si los agentes económicos, que nunca están preparados para una situación así consideren que no van a enfrentarse a ella con problemas, el cataclismo puede ser mortal.

-¿La intervención de CCM constata el fracaso de la supervisión bancaria en España?

-Sí, por supuesto. Todos veíamos desde hace mucho tiempo que las cajas de ahorros se dedicaban a actividades que la propia banca privada se había escurrido de ellas desde la crisis que fue desde el 77 al 93. Desde a tareas aeronáuticas a inversiones inmobiliarias absurdas que están muy lejos de la conducta de una caja de ahorros normal y todo esto con un riesgo excesivo e ilógico. Un porcentaje muy grande de las cajas ha hecho cosas realmente absurdas.

-¿CCM es la primera ficha que cae del dominó de las instituciones de crédito de esta misma naturaleza?

-Es difícil asegurarlo con rotundidad, pero las condiciones de esa caída recuerdan mucho cuando en 1997 cayó el Banco de Navarra y se dijo que era un caso particular, que no tenía ninguna importancia y luego vino todo lo que vino. Además, creo que es muy dificil que sólo CCM haya sido la única que ha hecho un disparate porque hay síntomas de que otras muchas lo han hecho.

-¿Qué espera de la política económica del Gobierno?

-No espero nada. Ahora sólo existen medidas populistas.

-¿Qué se necesita para reformar y mejorar la economía?

-La educación es un elemento clave y en España los sistemas educativos son lamentables. Están dando unos resultados pésimos. Si no tenemos una población activa bien preparada, una energía barata, abundante y de buena calidad y unas buenas vías de infraestructuras, de transportes y de comunicaciones se viene abajo cualquier sistema económico.

-¿Cuando empezará a notarse la recuperación del sector inmobiliario? ¿Y la culminación de esa recuperación?

-Las fechas en este caso son imposibles de fijar, pero va a estar en muy malas condiciones durante muchísimo tiempo y tendremos todavía años muy malos. Los que dicen que empezará a notarse el próximo año y que no culminará hasta pasados cuatro se equivocan.

-¿Qué espera de la cumbre del G-20 y qué debería salir de ella?

-Espero muy poco. En el ámbito mundial no se tienen ideas claras de lo que hay que hacer. Cada país está tratando de crecer y prosperar para problemas suyos inmediatosy eso hace que la coordinación sea dificilísima y por lo tanto, me sorprendería mucho que hubiese una política económica concorde y que esta política económica fuese seria y empujase hacia atrás la situación depresiva actual. Va a ser una declaración para que no se hunda el conjunto total de las expectativas, pero no va a resolver los problemas.