miércoles, 26 de enero de 2022

ARGUMENTACIÓN IDENTITARIA Y PROGRESISTA

 

Argumentación identitaria y progresista

Por Sebastián Urbina

Ocho escuelas catalanas imparten clases de islam a 337 alumnos con profesores contratados por la Generalitat, con un coste de 169.925 euros anuales. Es información dada por el consejero de Educación, el mismo que anima a los colegios a sublevarse contra las sentencias que obligan a impartir el 25% de las clases en español. (Agustín de Grado/OkDiario/2/1/2022.)

Lo antes citado es un hecho. No se trata de ninguna valoración. Como es sabido, de los hechos no se derivan, lógicamente, valoraciones. Con otras palabras, no podemos deducir lo normativo de lo descriptivo. Es la llamada ley de Hume.

Por tanto, a partir de los hechos descritos en el primer párrafo, no podemos deducir, lógicamente, frases normativas, del tipo, ‘esto es vergonzoso’. Insistamos en que la prohibición de derivar un ‘debe’ de un ‘es’, es de carácter lógico. No es una prohibición de carácter argumentativo.

¿Qué es una argumentación? Una serie de razones/pruebas que apoyan una conclusión. Empezamos con una exposición de lo que queremos tratar. El párrafo inicial expone, con mayor o menor rigor y brevedad, unos hechos. A partir de ahí, argumentamos. ¿Qué argumentamos? Por ejemplo, que vivimos en un sistema democrático en el que hay separación de poderes. Que el poder judicial, que es uno de ellos, es independiente. Si el poder judicial estuviera sometido al poder ejecutivo, no tendría sentido hablar de sistema democrático. O bien, dependiendo del nivel de sometimiento, podríamos hablar de ‘democracia de bajo o muy bajo nivel’. Yo creo que ‘muy bajo nivel’, viendo algunas decisiones del TS, entre otros altos niveles. También, podríamos argumentar que nuestra Constitución dice, en su artículo 118:

Es obligado cumplir las sentencias y demás resoluciones firmes de los Jueces y Tribunales, así como prestar la colaboración requerida por éstos en el curso del proceso y en la ejecución de lo resuelto.

A partir de ahí podríamos llegar a la conclusión de que las autoridades autonómicas catalanas deben cumplir las sentencias que obligan a impartir el 25% de las clases en español. Y en el caso de incumplimiento de dichas sentencias, debe procederse a la ejecución forzosa de las mismas.

A partir de una serie de hechos y razonamientos llegamos a una conclusión, que no es lógicamente necesaria, pero sí está justificada. El comportamiento al que nos referimos, es vergonzoso y democráticamente inadmisible. Sigamos. Si usted, ciudadano de a pie, no cumple con lo estipulado en una sentencia judicial firme, su comportamiento no le saldrá gratis. Habrá ejecución forzosa, con los costes añadidos previstos. ¿Por qué no se hace lo mismo con las autoridades autonómicas catalanas? Las autoridades tendrían que dar ejemplo. ¿O son ciudadanos por encima de la ley?

Cuando las autoridades políticas autonómicas incumplen, durante años, sentencias judiciales firmes, y no pasa nada, entramos en el ámbito político y dejamos de lado el ámbito judicial. ¿Es esto un comportamiento democráticamente aceptable? En absoluto. Este incumplimiento vuelve a ser un hecho. Durante años, las autoridades políticas catalanas han incumplido sentencias judiciales firmes. Pero los fachas son otros. ¡Qué nivel de aborregamiento disfrutamos!

Este hecho, repetido durante años, es una intolerable anomalía democrática. Tampoco es una deducción lógica, a partir de los hechos antes mencionados. Es una conclusión argumentada, que trata de persuadir al posible lector de que esto es democráticamente inaceptable. Y que, por tanto, hay que tomar las medidas previstas en las leyes para ejecutar las sentencias mencionadas. No se hace. Además, la mayoría de políticos- principalmente PP y PSOE (aunque desde Zapatero, el PSOE es claramente peor) han renunciado a parar las ilegalidades y deslealtades de los separatistas antiespañoles. En abril 2021, más de 2.500 jueces acuden a la UE por la "violación del Estado de Derecho" en España. Gobernando Sánchez y cuadrilla. Tranquilos, el facha es Vox.

Ahora, el socialista Sánchez depende de los separatistas antiespañoles para seguir gobernando. Y de comunistas, golpistas y filoetarras.

Pero, dado que no estamos en el ámbito de la deducción lógica, se puede argumentar de otro modo. Los gobiernos españoles utilizan a los jueces (nunca han probado lo que afirman) para humillar y maltratar a Cataluña y su sagrada lengua. Y, en consecuencia, a los catalanistas no les queda más remedio que defenderse. ¿Cómo? No cumpliendo sentencias ‘políticas’ (tampoco lo han probado) que tratan de oprimir y humillar al pueblo catalán. Las criadas mediáticas subvencionadas lo rebuznan constantemente. Y Sánchez callado.

Estas peligrosas anomalías se ven apoyadas por algunos políticos. Me refiero, entre otros, al actual amigo del dictador venezolano Maduro, Rodríguez Zapatero. Aparte de otras mezquindades, recordaré su obsesión por el ‘fierabrás’, llamado ‘diálogo’. Zapatero insistía en que, frente a la desobediencia reiterada a las sentencias judiciales firmes, y otros vergonzosos y antidemocráticos comportamientos, había que insistir en el diálogo. Con los enemigos declarados de España. También con los criminales etarras. No con la derecha. Exquisitamente democrático.

El actual presidente, Sánchez, (el del ‘no es no’), dialoga con separatistas antiespañoles, comunistas, golpistas y filoetarras. Que son el soporte imprescindible de su gobierno. ¡Qué chulo es el diálogo!¡Pero no con Vox! Es ultraderecha. ¡Qué espanto!

Llegados a este punto, y dada la chusma política dominante (si los ciudadanos son como los políticos- excepciones aparte-, estamos perdidos), no queda sino apelar a la sensatez de los votantes para no convertirnos en una República Bolivariana. Para evitar que los ciudadanos sean sensatos hay políticos interesados en que el sistema educativo adoctrine y no sea exigente. Que no se suspenda, porque es una humillación, que sea fácil y diver, etcétera. ¿Para qué? Para aborregar a los estudiantes, que son futuros votantes. Para que traguen. ¿El qué? Lo que se muestra diariamente en los mayoritarios y subvencionados medios de manipulación. Botellones aparte. Como esto tampoco es una deducción lógica, otros pueden decir que esta educación sirve para que los estudiantes sean más transversales, solidarios y con perspectiva de género. Hay que repetirlo mucho a ver si cuela.

Si la mayoría de políticos- ayudados por los siervos mediáticos subvencionados y el sistema de enseñanza/adoctrinamiento- permiten que los enemigos declarados de España incumplan, durante años, sentencias judiciales firmes, están deteriorando gravemente el sistema democrático. ¿Exagero?

Entonces, por una mínima coherencia, los ciudadanos democráticos no deberían apoyar- con sus votos- a los partidos socios de esta bazofia antidemocrática. O sea, a los enemigos declarados de la Monarquía, de la Constitución y de España.

Pero se puede argumentar de otro modo.

Vivimos un peligroso nacionalismo español del que Vox es su apoyo más reaccionario. ¡Alerta antifascista! ¡No pasarán!

¡Libertad y progreso! ¡Vote social/comunista/ separatista/golpista/filoetarra! ¡Es chulísimo!

Usted decide.

 

(MallorcaDiario/26/1/2022.)



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