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Leo (PeriodistaDigital/7/3/2007) unas declaraciones del periodista Hermann Tertsch, columnista de El País y contertulio de Onda Cero.



'No hay nada en España que cuadre más con un fascismo que las juventudes de Batasuna y de ERC ... Viendo la televisión de Chaves, la catalana o la ETB, decir que TeleMadrid manipula más es un insulto a la inteligencia ... El guerracivilismo ha vuelto a los comunistas españoles y ha vuelto a la izquierda, en general, española de una forma bastante peligrosa y triste ... Los que tanto desean perseguir a Pinochet hasta después de la tumba, pero después aplauden a Castro, realmente no me merecen ningún respeto'.



Título de la noticia: 'Políticamente correcto'.





Es propio de la izquierda cavernícola ignorar o minusvalorar los argumentos que se utilizan en un debate y centrarse en el lugar ideológico que se supone que ocupa 'el otro'. Por ejemplo, no intente argumentar (y aportar datos) que los partidos de izquierda, durante la II República, no tenían mucho respeto por la reglas democráticas sino que pretendían un cambio revolucionario. Este fue el caso de la Revolución de 1934, iniciada por el PSOE y ERC. Intentona fallida (aunque con muertos) que denunció el sector digno y sensato del propio PSOE, como J. Besteiro. En minoría, claro.

Habrán adivinado que me refiero a P. Moa, insultado hasta la saciedad por los 'historiadores de izquierdas'. Como ha denunciado, repetidamente, el historiador Stanley Payne, ''he oído muchos insultos contra Moa pero pocos argumentos''. Esto no es casual. Al contrario, forma parte de la degeneración ideológica de ''la izquierda''. Para ellos, no importa argumentar para vencer en un debate. Basta denunciar, ''este tío es un facha'', para que la victoria sea rotunda y sin paliativos.


Este género de locura conduce a la idiotez militante. A medida que no se argumenta, no hay que pensar, ni siquiera leer. Al menos los libros que carecen del ''nihil obstat'' del pensamiento políticamente correcto. De cada vez más, el ''argumentario'' de esta gente se reduce a unos cuantos calificativos: facha, extrema derecha, franquista, golpista y otras profundidades de la reflexión de izquierdas.


Algo parecido sucedió en Francia con el ''Libro negro del comunismo'', en el que se cuentan los crímenes provocados por esta ideología. Siguiendo la tradición estalinista, se desacreditó a los autores de manera machacona e inmisericorde. También se criticó el libro, y se hizo aún antes de salir a la venta, lo que prueba, una vez más, que la izquierda no necesita leer para saber la verdad. La verdad son ellos. ¿Acaso lo dudas? Se insultó y se desprestigió al grupo de historiadores dirigidos por Stéphan Courtois. Es la típica advertencia revolucionaria, ''cuidado si nos criticas; lo pagarás caro'' . Estos historiadores franceses habían hecho el recuento de los crímenes a cuenta del comunismo (guerras aparte), que se elevan, aproximadamente, a ochenta millones de muertos.

Como cuenta Martín Amis, en su libro 'Koba el temible', la intelectualidad europea de izquierdas, practicó una ceguera voluntaria ante los crímenes y los horrores de los diversos ''paraísos'' comunistas. Estos son los que reclaman tener una superioridad moral sobre los demás. También están aquí, al lado nuestro.

Por cierto, todavía, ser anticomunista equivale (para el rojerío actual) a ser fascista. Por tanto, cuidadito con criticar, en serio, al comunismo. Se convertirá en un ''perro fascista''. O sea, puede insultar lo que quiera a Pinochet. ¡Es progre y diver! ¡Pero cuidadito con lo que dices de Castro!


Por cierto, recomiendo la película 'La vida de los otros'. Habla de un 'paraíso' comunista. Alemania Oriental.

Sebastián Urbina.

PD.
Nadando contra corriente en su partido, la concejal del PSOE y profesora de Sociología en la Universidad del País Vasco, Gotzone Mora, se ha convertido en una luchadora por la libertad.


Pregunta: ¿Qué le parece que el PSOE tache de ''extrema derecha'' a quienes se manifestaron el viernes contra la excarcelación del terrorista?
Respuesta: Bochornoso. Desde la izquierda siempre hemos reivindicado el uso de la palabra y de la calle, y ahora se descalifica a la derecha por manifestarse.


PD.
Estuve en la manifestación en la Plaza de Cort (viernes noche) por el mismo motivo. Llena la plaza y también la calle Colón. Había banderas españolas y de nuestra Comunidad. Como debe ser. Los partidos que se avergüenzan de sus símbolos nacionales no deberían ser votados por los españoles decentes. O sea, demócratas.