sábado, 15 de noviembre de 2014

LA FARSA CATALANISTA.


 (Mientras tanto, los fiscales de Cataluña tienen intensas reuniones porque no terminan de ver claro que Artur Mas haya cometido algún delito. 

Se ve que eso de desobedecer las sentencias del Tribunal Constitucional no tiene importancia. ¡Qué cosas!)







LA FARSA CATALANISTA.

Madrid.- Después de que los propios votantes demostraran las irregularidades de la consulta del 9N, toda una farsa, ahora uno de los voluntarios ha desmontado, en 6 pasos la votación. 

El fotoperiodista Sergi Santiago narra en su blog cómo vivió el 9N siendo voluntario en Castelldefels y L’Hospitalet de Llobregat (ambas, localidades de Barcelona) y detalla hasta 6 irregularidades que desmontan la consulta. 

Apuntado como voluntario para vivirlo desde dentro, aclara que en ningún momento quiere cargar contra la consulta pero sí hacer ver que el 9N fue una gran farsa organizada, como ya han denunciado antes los propios votantes. 

A continuación, las irregularidades que denuncia este periodista que vivió en primera persona la consulta:

1. Votaron quiénes no podían. Aunque, asegura, les habían insistido en que tenían que votar solo aquellos que tuvieran el DNI en rigor, cuenta que en su mesa acpetaron la papeleta de un hombre cuyo carné llevaba caducado un tiempo. 

2. Votar dos veces. El problema del censo hizo que los registros de votantes no fueran exactos. El periodista cuenta en su blog el caso de una pareja que acudió a votar en su local, aunque por dirección no les correspondía. Tras comprobar que se habían confundido, la mesa en la que tenía que votar la mujer, cambió del sistema la dirección de ésta, por lo que si hubiera querido, podría haber votado por segunda vez acudiendo al local que le correspondía. "Pedí que llamáramos al otro local para explicar la incidencia y que no pudiera repetir voto, pero a todo el mundo le pareció desproporcionado y se acordó confiar en la buena voluntad de la pareja", cuenta este voluntario. 

3. Dar como válidas las papeletas de la ANC. Días antes de la votación, la Asamblea Nacional Catalana distribuyó como publicidad papeletas parecidas a las de la consulta alternativa. Aunque en el local se dio la orden de que no servían por no ser oficiales, finalmente se aceptaron al comprobar que había varias urnas con algunas de estas papeletas. Incluso, en su mesa, cuenta Sergi Santiago, se intentó contar como 'sí-sí' una papeleta de ANC, entendiendo que aunque estaba en blanco, el votante estaría de acuerdo al utilizar ésta y no la oficial. 

4. Contar como ‘sí-sí’ votos que eran nulos. Siempre desde su experiencia, el periodista voluntario del 9N reconoce que muchos de los votos que deberían ser nulos se contabilizaron a favor. El caso más llamativo, el de sobres con dos papeletas (una marcada y otra no), que se dieron por buenos. 

5. Obligar a los voluntarios a estar en la carpa de ANC. Aunque aquel que se presentaba como voluntario debería haber estado en los locales, muchos fueron enviados a las carpas que ANC instaló fuera de los locales para recoger firmas pidiendo a la UE amparo para celebrar una consulta legal. Muchas de estas mesas de firmas acabaron dentro de los colegios, aunque a priori estaba concebido como cosas independientes. 

6. Informar a los votantes confundidos 'barriendo para casa'. "Muchos votantes vinieron sin saber realmente qué quería decir cada pregunta (muchos pensaban que se trataba de una respuesta de sí/no). Algunos voluntarios se anticiparon a sus dudas intentando ‘aclarar’ qué querían decir las preguntas. 

Una coordinadora de proceso le dijo a una ciudadana que la primera pregunta significaba 'vivir mejor y tener más dinero'. En otro caso, más neutral, un voluntario explicó que si quería quedarse igual, votara ‘no’; si quería que las cosas cambiaran pero no demasiado, votara ‘sí-no’, y si quería un cambio total, marcara ‘sí-sí’. 

Otra voluntaria, al escuchar que dos ancianas habían votado ‘no’, les pidió que le enseñaran las papeletas y les dijo '¡¿Pero qué han votado señoras?! ¿No han entendido las preguntas?'. La vocal de una mesa llamó a tres chicos al escuchar que habían votado ‘no’, pero ellos no la escucharon", relata en último punto este periodista metido a voluntario. 

(LaVozLibre)

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