miércoles, 7 de julio de 2010

NO PUEDEN DAR LECCIONES.











El líder de IU, Cayo Lara, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que denuncien a los gobiernos autonómicos que incumplan las leyes aprobadas, especialmente la Ley del Aborto y la de Dependencia,
e IU canalizará todas estas denuncias ante la Fiscalía «No se puede tolerar», ha dicho Cayo Lara en una rueda de prensa en la sede de la formación, que el PP mantenga una posición de «rebeldía permanente» ante las leyes que no se ajustan a su criterio.

«Las leyes, gusten o no gusten, hay que acatarlas» , ha insistido. Ahora ha sido Murcia, ha explicado, la comunidad que ha decidido no acatar la Ley del Aborto mientras no se resuelva el recurso de inconstitucionalidad que ha presentado el PP, pero le consta que también en Madrid y en Valencia se están poniendo trabas administrativas para dejar sin efecto la Ley de la Dependencia. Durante los últimos cinco años, ha recordado, el PP ha presentado unos 35 recursos de «supuesta» inconstitucionalidad de iniciativas legislativas con las que no estaba de acuerdo.

Ha comentado al respecto otras «polémicas» similares impulsadas por este partido como la que se originó con la asignatura de educación para la ciudadanía, que en comunidades como Valencia intentaron sustituir por clases de inglés. En el último caso de «rebelión» legislativa, el de Murcia en relación con la ley del aborto, se da la paradoja, ha apuntado Cayo Lara, de que es la comunidad con la tasa de abortos más alta (un 16,5 de las 105.000 mujeres que abortan anualmente en España), lo que demuestra que allí «no han funcionando» las políticas de prevención. Por otro lado, el líder de izquierdas ha puesto de relieve la necesidad de abrir un debate sobre la objeción de conciencia «y sus límites», en alusión a los médicos que se acogen a esta opción para no practicar interrupciones del embarazo. «¿Qué pasaría?», se ha preguntado, «si todos nos declarásemos objetores en el pago de impuestos». (ABC)
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No pueden dar lecciones.




La ley del Aborto y la de Dependencia. Estas leyes le interesan especialmente a Cayo Lara. Pero me pregunto ¿qué ha hecho Cayo Lara estas últimas décadas con los incumplimientos de la ley por parte de los separatistas periféricos? Nada. Ni siquiera ha incitado a los ciudadanos a denunciar a los comportamientos ilegales de los separatistas. Cayo Lara no tiene ninguna credibilidad.




En segundo lugar, las leyes de un Estado democrático, en principio, deben acatarse.
Sin embargo, esta idea de Cayo Lara supone un respeto fanático al Estado y a las mayorías.

Afortunadamente, nuestros legisladores no pensaron como Cayo Lara. Aunque la objeción de conciencia se planteó, inicialmente, solamente referida al servicio militar, la situación actual es otra.


Por eso, el Tribunal Constitucional — con ocasión de un recurso planteado contra la ley de aborto— hizo notar que no era estrictamente necesaria una regulación de la objeción de conciencia para que ésta fuera protegida en cuestiones distintas a la mencionada del servicio militar. En sentencia de 11 de abril de 1985 establecía lo siguiente: Por lo que se refiere al derecho a la objeción de conciencia..., existe y puede ser ejercido con independencia de que se haya dictado o no tal regulación. La objeción de conciencia forma parte del contenido del derecho fundamental a la libertad ideológica y religiosa reconocido en el art. 16.1 C.E y, como este Tribunal ha indicado en diversas ocasiones, la Constitución es directamente aplicable, especialmente en materia de derechos fundamentales.



El propio Tribunal Constitucional ha dicho, en repetidas ocasiones, que la objeción de conciencia es un verdadero derecho constitucional, esté o no regulado en leyes positivas.


Finalmente, si nadie quisiera pagar los impuestos, el Estado se iría al garete. Esto podría pasar si los políticos fuesen como Cayo Lara. Todavía no hemos llegado a eso. Aunque sin levantar la voz. No creo que hiciera mala pareja con Zapatero.


Sebastián Urbina.

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