jueves, 20 de diciembre de 2018

CIUDADANOS, VOX Y EL PSOE.





Ciudadanos desprecia y le hace ascos a Vox, pero no al PSOE, que acaba de aceptar una reunión 'bilateral', (impuesta por el golpista Torra) entre el propio doctor Sánchez- presidente para nuestra desgracia- y el presidente-racista Torra. El que lleva lazo amarillo en homenaje a los golpistas.

¿Cree Ciudadanos que los ciudadanos son tontos? ¿Cree que esta es una actitud digna?

No lo es. Ni la del PSOE- que es auténtica desvergüenza- ni la de Ciudadanos si pacta con este partido podrido y traidor a España. Con gran felicidad de los golpistas y compañeros de viaje. 





DIALOGAR CON QUIENES QUIEREN DAR UN GOLPE.

No hay más ciego que el no quiere ver, y Zapatero prefiere enmascarar la realidad de Cataluña, como demuestran afirmaciones como la de que los políticos acusados de rebelión -o fugados- "no son golpistas"

La repercusión de la entrevista con el ex presidente que publicamos ayer ha tenido una extraordinaria repercusión, entre otras razones porque da la impresión de que su percepción del problema catalán está hoy tan distorsionada como cuando en 2003, como candidato a la Presidencia, prometió apoyar cualquier reforma del Estatut que aprobara el Parlament. De aquello se tuvo que desdecir no mucho después, aunque ya no evitó dar alas al independentismo.

Si entonces demostró una gran irresponsabilidad, como el tiempo ha demostrado, preocupa que en la actualidad sus diagnósticos sean los que le sirven al presidente Sánchez para encarar el mayor desafío al que España se enfrenta desde la recuperación de la democracia. De ser así, mal vamos, desde luego.

La Justicia dictaminará si los políticos hoy en prisión provisional cometieron delitos y cuáles. Pero por lo pronto de lo que no hay duda alguna es de que en Cataluña se intentó subvertir el orden constitucional, acabar con el Estado de derecho y con la unidad nacional, y se llegó tan lejos como a la misma proclamación de la independencia catalana. Durante mucho tiempo se ha vivido, en plena efervescencia insurreccional, un proceso golpista continuado. 

Y de esos objetivos no han abjurado los actuales responsables políticos de la Generalitat, instalados en un perpetuo desacato y en el enfrentamiento puro y duro con los poderes del Estado. Zapatero exhorta a Sánchez a que siga con "el diálogo" y vemos cómo en esa línea el Gobierno lleva días mendigando una audiencia al presidente Torra el próximo viernes.

Lo peor a estas alturas es que se abracen análisis maniqueos y equidistantes entre quienes sólo tienen como hoja de ruta derribar el Estado y el conjunto de los demócratas. En ese sentido, el líder del PP, Pablo Casado, recriminó ayer a Sánchez que siga apostando por un diálogo con quienes buscan romper la ley. Sólo en el marco del ordenamiento constitucional, y cumpliendo las reglas de juego, se puede hablar de todo. Pero es el independentismo el que debe moverse en esa dirección, no al revés.

Y las declaraciones del Govern no apuntan hacia ahí. Hoy mismo en nuestras páginas el vicepresidente Pere Aragonès insiste en que no se van a desviar "ni un solo milímetro" de sus planteamientos, a la vez que denuncia "represión judicial", salva la cara a los CDR y asegura que el diálogo político debe dirigirse al "reconocimiento de la autodeterminación", algo que no contempla nuestra Ley Fundamental.
 
Así las cosas, ¿qué quieren Zapatero y Sánchez dialogar?

 (Edit.ElMundo/17/12/2018.)
 

(¿Con esta gentuza quiere pactar Ciudadanos? Si lo hace, espero que se hunda electoralmente.)

No hay comentarios: