(Alguien, como Errejón, que pretende representar a los españoles, tiene el deber de justificar afirmaciones tan estrambóticas como imprudentes.
¿Por qué es desproporcionada? ¿Por qué es inútil? Se pueden criticar las decisiones judiciales- aunque todavía no se ha publicado- pero un mínimo de decencia política exige justificar las críticas.
¡Menudo analfabeto!)
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