martes, 2 de julio de 2013

SIN SENTIDO DEL RIDÍCULO

(En la foto pueden ver el lamentable estado en el que viven, malviven, los pobres catalanes. Cargados de cadenas. Físicas y espirituales.

Sin libertad; sin poder hablar una de las lenguas más habladas en Cataluña, el catalán; sin libertad de expresión; sin órganos políticos que los representen; sin medios de difusión en los que expresar sus opiniones; sin elecciones libres y periódicas. Y un largo etcétera de humillaciones sin cuento a cargo de la fachosa y
casposa España.
)

SIN SENTIDO DEL RIDÍCULO.

‘Es grotesco que exijan libertad capas sociales que viven de ella, que nos gobiernan desde hace tres décadas y viven del poder, que nos llamen colonos, que exijan derecho a decidir quienes niegan ese mismo derecho a nuestros hijos en las escuelas'.

(Antonio Robles/LaVozdeBarcelona.) 

 

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 (Periodista Digital)

Albert Boadella: "Cualquier disidencia es considerada una traición en Cataluña"

 

1 comentario:

Arcoiris dijo...

Han llenado un “Nou Camp”. Allá por el 2005 o así, (lamento no poder ser mucho más exacto), en plena época del Zapatero más presuntuoso, antes de que se reconociera la crisis por el supervisor de nubes y su partido, se podrían haber llenado hasta casi diez “Camp Nou”, que no sólo uno, con los pobres de Cataluña, “(…) unos 1,2 millones de personas, lo que se traduce en cerca del 20% de la población, según datos de la Fundación Justicia y Paz (…)” Eso, después de una treintena de años de gobiernos ininterrumpidamente catalanistas. ¿Cuántos se llenarían ahora?
¿Porqué han de gobernarnos unos catalanistas independentistas que son minoría? ¿Han visto ustedes los balcones y ventanas de nuestras poblaciones? No sé cómo no se abochornan: en la mayoría abrumadora de nuestros domicilios retruena el silencio, la ausencia de banderas esteladas. Pese a que creo que la mayoría de separatistas asomarán sus símbolos, mientras que los más de los que no sean de su cuerda se abstendrán de tomarse molestia alguna. A semejanza de lo que ocurre en los comicios. No creo que falte a la cita ningún catalanista con un mínimo de aliento. Unos votarán CIU; otros, ERC, IU, PSC, etc. En cambio, los heterodoxos, la mayoría, repito, la mayoría de ciudadanos de Cataluña, votamos otras opciones (PP, C’, etc.) o no votan.
Ya lo he dicho en otro comentario: aquí ha ganado siempre, en las urnas, CIU. Lo que no sabe, quizás, mucha gente, es que la abstención ha ganado en todas y cada una de las convocatorias. Ha ganado de calle. ¡Y no tiene representación alguna en el Parlament! Son gentes que no se sienten representadas por ninguna opción partidista españolista; lo que me parece claro es que no votarían, en la vida, por opciones catalanistas.
Así, por ejemplo, en las elecciones para el “Estatut d’autonomia” del 2006, sobre un censo de 5.201.715 criaturas, votaron 2.570.256 personas y se abstuvieron tantas como 2.631.459. Apostaron por el sí otro 1.882.533, por el no 528.745, en blanco 135.982 y se declararon nulos otros 22.996. Sin embargo, se declaró la victoria del sí por el 73% de los votos. Con un par, o como decía Roger Moore en un anuncio de la tele, años atrás, con una mano en el bolsillo del pantalón, a propósito de una conocida marca de coñac: “Siento tres”. Será verdad, serán matemáticas electorales, pero es un flagrante fraude democrático como, en mi opinión, que gobiernen necesaria e ininterrumpidamente los mismos pocos.