miércoles, 1 de diciembre de 2010

GENTUZA UNIVERSITARIA (de izquierdas)












GENTUZA UNIVERSITARIA (de izquierdas)

Día 01/12/2010 -(ABC)
El cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, no pronunciará finalmente la conferencia que tenía previsto impartir en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Autónoma de Madrid, después de que a lo largo de la semana en distintos edificios de la universidad hayan aparecido pancartas convocando al boicot a lo conferencia de Rouco.
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El rojerío antidemocrático muestra su faz. Intolerantes, agresivos y estúpidos. Encima se creen moralmente superiores. O sea, la izquierda.

Y los que, siendo de izquierdas, no comparten estas conductas zafias y fachas, que lo digan en voz alta.
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Gregorio Marañón: Aún es mayor mi dolor por haber sido amigo de tales escarabajos y por haber creído en ellos. Llamaba escarabajos a los líderes izquierdistas, en quienes “todo es latrocinio, locura y estupidez”.

Gregorio Marañón y Posadillo, (Madrid 19 de Mayo de 1887/ 27 de Marzo de 1960) fue médico endocrino, científico, historiador, escritor y pensador español, cuyas obras en los ámbitos científico e histórico tuvieron gran relevancia internacional. Durante un largo período dirigió la cátedra de endocrinología en el Hospital Central de Madrid. Fue académico de número de las ocho Reales Academias de España.


1 comentario:

Arcoiris dijo...

ZP, el pretendido adalid del talante, el diálogo y el buenismo, y el PSOE están gobernando contra la ciudadanía (¿quién no se ha empobrecido durante estos años de “progreso”?) pero, muy especialmente, contra un partido político, el PP, y contra sus votantes. Comenzaron con la firma del Pacto del Tinell, con lo que pretendían la desaparición del PP de la palestra política catalana, y continuaron en la misma línea tratando de estrangular a nivel nacional a lo que llaman despectivamente “la derecha” mediante un “cordón sanitario”. No hubo aparición pública ni declaración de miembros del gobierno sin que se sacara a colación, viniera o no a cuento, la pretendida perversidad del partido de la oposición, su maldad intrínseca, satánica. Sin embargo, convencieron a la opinión pública de que era el PP el que crispaba el escenario político y social del país. Han cavado una profunda trinchera en la sociedad española con sus disposiciones (ley de memoria histórica, educación, propaganda…) alineando y enfrentando, unos a un lado, otros delante, a los ciudadanos de esta nación: han aventado odios y rencores entre hermanos, han fomentado una tensión guerracivilista. Han levantado un muro de intangibilidad para sus notables y, al socaire de excusas como el “machismo” o un “comportamiento facha”, han interpretado el papel de gravemente ofendidos y humillados frente a cualquiera crítica o alusión contra los suyos que viniera de fuentes “ultramontanas”. Sin embargo, se podía asumir sin estremecimientos que se ofendiera con gran regocijo de unos a España en televisiones autonómicas, se quemaran imágenes de nuestros monarcas o que se les abucheara en los estadios futbolísticos u otras apariciones públicas. Han procurado infiltrar en las conciencias, con cierto éxito, que “la izquierda” tiene derecho natural al control en exclusiva del poder en nuestra sociedad y que “la derecha” merece el repudio general y todas las imaginables descalificaciones.
Si las cosas son así en nuestra casa, y no me parece que yo ande muy descaminado, si nuestro Gobierno y su partido ejercen tal magisterio, ¿qué podemos esperar de la ciudadanía y las instituciones? ¿Cómo hemos de extrañarnos de la intolerancia de nuestra Universidad, de su horror al eclecticismo, de su rechazo a lo que consideran heterodoxia?