sábado, 28 de julio de 2007

NOTICIAS BREVES (y preocupantes)



27/7/2007





La Brunete mediática informa.


Una señora de Hospitalet del Llobregat (Doña C.B.) escribe una carta al director (ABC) en la que dice: ''Oigo a algunos nacionalistas lamentar que no pueden vivir completamente en catalán porque en algunos cines no encuentran la última película de Harry Potter en catalán ... En nuestra comunidad autónoma ES IMPOSIBLE conseguir en español algo tan elemental como el impreso de una receta médica de la sanidad pública, la matrícula de la escuela de un hijo o una solicitud para pedir una subvención a la Administración'.


A la desvergüenza característica de los nacionalistas, se une la cobardía de los que dicen no serlo. El PSC es nacionalista catalanista, como CIU y ERC. Todos ellos apoyan (o no se oponen) la total catalanización. Como hizo Franco, pero al revés. Son igual de totalitarios. El problema es que Rajoy, si gana las elecciones no impedirá este abuso. No se opondrá con firmeza a este atropello.

¿Que hará Sirera? Espero y deseo equivocarme. El PP debería defender el bilingüismo. Y distanciarse de las posturas propias de totalitarios franquistas y catalanistas.


Más opiniones de fachas.



Ahora resulta que 'Los extremistas islámicos son cada vez más jóvenes. Scotland Yard descarta que los delitos sean fantasías juveniles y propone aumentar el control sobre los estudiantes radicales islámicos'.


Más opiniones reaccionarias.



Esta vez es el Secretario del Papa (claro, ¡qué van a decir estos meapilas!) denuncia ''los intentos de islamizar Europa. No podemos negar que existen intentos de islamizar europa, señaló GeorgeGänswein, en una entrevista concedida al suplemento que el diario 'Süddeutsche Zeitung' publicó ayer. Gänswein cree que se debe hacer frente a esta situación y no ignorar por falsas consideraciones el riesgo para la identidad de Europa, que se deriva de esta creciente islamización'.


En la línea de la lúcida y valiente Oriana Fallaci, se repiten los avisos. Pero tengo mis dudas de que sirvan para algo. Lo normal es que la cobardía de una población acomodaticia que, en general, vive bien (recordemos que hace días, una encuesta mostraba que el 75% de los españoles dice sentirse satisfecho con su vida) hace difícil que reaccione hasta que no le arreen fuerte.

Vemos el caso del País Vasco. El miedo puede más que la dignidad. Matan o coaccionan a vecinos y la gente (la mayoría) mira hacia otro lado. Incluidos la mayoría de los políticos, periodistas y otras personas relevantes. Ya no hablo de la Iglesia Católica porque, en general, sería echada a patadas por el culo del templo. Si Jesucristo volviera. De esta cobardía (y también relativismo) se aprovechan los nacionalistas y, también, los islamistas. Relativismo que no les incluye a ellos, por supuesto. No sólo esto, sino que los que denuncian (denunciamos) tales peligros son acusados (si son suficientemente importantes, que no es mi caso) de intolerantes y otras hierbas. Es el colmo.


Creo que Europa vive una situación preocupante. Mucho más porque, en general, no se quiere mirar de frente al peligro. Al contrario. Los que avisan son 'los malos'. Además de exagerados apocalípticos. Tal vez esta sociedad merezca hundirse. Ya le pasó a la imperial Roma, que también tendría sus ¡exagerados apocalípticos'. Una sociedad que no sabe (ni quiere defenderse) no merece sobrevivir. Esperemos que mis augurios estén completamente equivocados.


Sebastián Urbina.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo creo que los augurios van a cumplirse.

Es cierto que el futuro no está escrito y que el Destino no es inexorable. En nuestras manos está el modificarlo. La tragedia se producirá porque no existe voluntad de hacerlo.

La inercia que llevamos nos aboca a la catástrofe. Siempre existirá la posibilidad de cambiar el rumbo y evitarla, pero a medida que pasa el tiempo, el precipicio está más cerca y las probabilidades de evitarlo serán menores. Yo no creo que se cambie el rumbo. Seguramente nuestra civilización se hundirá y nosotros lo veremos. Los bárbaros están en las puertas, los enemigos internos están entre nosotros y no hay voluntad generalizada de resistencia.

Se me podrá llamar pesimista, pero a veces, viendo a mi hijo, pienso que llegará el día en el que tanta estupidez acumulada pasará factura por fin y la desgracia caerá sobre nosotros, sobre nuestras familias y sobre toda nuestra sociedad.

Joan dijo...

Como hizo Franco, pero al revés.
Això voldria dir que el català seria obligatori a Madrid i el castellà estaria prohibit a Madrid (excepte l'ús familiar).
Realment és així, senyor Urbina?
On és el seu rigor lògic?

Sebastián Urbina dijo...

No hay peor sordo que el que no quiere oir. Lo que significa, en este contexto, es que Franco trató de imponer el castellano o español, de forma excluyente. Los catalanistas tratan de imponer el catalán, de forma excluyente.

Pero Franco no presumía de demócrata. En cambio, los catalanistas dicen que lo son.

No pierda el tiempo con frivolidades, ni lo haga perder a los demás.

Joan dijo...

Franco "no trató de", va imposar el castellà i va prohibir el català sense manies...
Els catalanistes no intentam imposar res, perquè exigir l'ús d'una llengua al seu territori no és imposar-la. I a més no la podem imposar perquè el castellà també és oficial i segons la constitució de 1978 és l'única llengua de coneixement obligatori, dins i fora del seu territori.
Així, a l'estat espanyol, hi ha un grup privilegiat, els que parlen en castellà, que el poden parlar sempre i per tot. Després hi ha tres grups sotmesos, catalans, gallecs i bascos, que només el poden parlar a vegades i sempre dins del seu respectiu territori.
A Espanya hi ha discriminació per raó de l'idioma! I encara que sigui legal i constitucional és injust i immoral!!!

Sebastián Urbina dijo...

Joan, no deseo discutir (ni irritarle) más esta cuestión porque me parece que usted está muy implicado emocionalmente. Así es muy difícil, aunque la asepsia absoluta es imposible.

De modo que sólo le diré una cosa por si quiere pensar en ella.

No tiene sentido racional hablar de 'las lenguas en SU territorio', a menos que se refiera a una constatación fáctica. Pero las constataciones fácticas no implican derechos. Además, los hechos no se justifican a sí mismos.

Por ejemplo, la existencia de la esclavitud no es suficiente para justificarla.

Finalmente, la situación que algunos proponemos no es eliminar el catalán de la vida pública (como Franco) sino dar libertad a las personas para elegir entre las lenguas más 'factibles', aquí y ahora, que son las dos oficiales. Por ejemplo, el japonés es menos 'factible' para la gran mayoría que las dos lenguas actualmente oficiales. Si la 'comunicación' es un aspecto central para las lenguas .Además, no todos los catalanes piensan como usted.

Personalmente, creo que todas los niños que viven en comunidades tradicionalmente bilingües deberían aprender (escrito y oral) las dos y, luego, usar la que quieran. ¿Por qué? Porque la libertad es un valor seminal y prioritario en cualquier organización democrática y porque las lenguas lo son de las personas que las usan.

MGG dijo...

Una petita reflexió: i la meva llibertat de rebre ensenyament en català a qualsevol territori no bilingüe de l'Estat on és? No som iguals en teoria?
Segons vostè que justifica un dret, la llei? Una lleu feta amb els peus i aplicada a potades (almenys en qüestions lingüístiques) com la Constitució?
Mentre mitjançant la Constitució uns haguem de saber una llengua que no és nostre (podrà fer totes les puntualitzacions que vulgui sobre això però els meus pares no me l'ensenyaren ni mi xerraren mai)com a DEURE i els altres tengui el DRET de saber o no saber una altra llengua, malament anam.
I jo també estic implicat emocionalment, tant com vostè, si no hi estàs impicat no hauria tret aquesta notícia.

La Guarida del Dragón dijo...

Joan, nadie prentende erradicar el catalán, al contrario, el catalán es una lengua española y como tal debemos protegerla. Eso es muy distinto a obligarla o utilizarla de manera excluyente. Se pueden utilizar las dos lenguas y complementarse. Ésa es la riqueza que tenemos y de lo que debemos sentirnos orgullosos.