Leo (ElSemanalDigital/3/10/2006)
ESPERANZA AGUIRRE CONVOCA UN ACTO EN DEFENSA DE LA NACIÓN ESPAÑOLA.
El acto, que será presentado por la periodista Isabel San Sebastián a partir de las 20 horas de este miércoles en la Real Casa de Correos, tiene como objetivo la presentación por parte de la Fundación para la Defensa de la Nación Española (Denaes), que preside Santiago Abascal, de su proyecto para fomentar desde la sociedad civil la defensa y el conocimiento de la nación española.
La convocatoria viene realizada por el propio Santiago Abascal junto a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. Intervendrán varios de los patronos de la Fundación y se emitirá un video realizado por Iñaki Arteta.
El Patronato de la Fundación lo foman Gustavo Bueno, Alejo Vidal-Quadras, Francisco Caja, Jaime Larrínaga, Amando de Miguel, Cristina López Schlichting, Gabriel Cisneros, Jon Juaristi, Adolgo Prego de Oliver, Fernando García de Cortázar y Sabino Fernández Campo.
Magnífica iniciativa. Llevamos muchos años sufriendo el acoso de los nacionalistas periféricos y el rojerío (la izquierdona), que han hecho creer a muchos que 'España' es equivalente a 'España franquista'. Típica mala fé de estos personajillos sin escrúpulos, porque hay que ser imbécil para creer que ambos conceptos son intercambiables. Claro que no debemos descartar que se lo crean en serio. Los nacionalistas nunca han destacado por sus altas dotes intelectuales. Al contrario, victimismo, mentira y chantaje son sus señas de identidad. Lo que antes he dicho es un ejemplo.
Además, el nacionalismo no tiene 'detrás' personajes de relieve sino medianias. ¿Alguien comparable a Adam Smith, Alexis de Tocqueville, Stuart Mill, por citar sólo algunos de los destacados miembros de la corriente liberal? Nada. Suplen el páramo intelectual con las características, nada recomendables, mencionadas.
No sólo me produce satisfacción esta iniciativa (por cierto, no excluyente a diferencia de los nacionalismos periféricos) sino que también me produce felicidad los previsibles retortijones y risas despreciativas de los progres de salón y de sus amigos nacionalistas. De todos modos, no escribo para ellos.
Sebastián Urbina.
PD. Estos individuos llaman a ciertas personas (previsiblemente a mí ¡qué satisfacción!) 'españolistas', como si fuera un insulto. Si mereciera la pena habría que preguntarles qué significa ser 'españolista'. Si significa tener una vinculación emocional, histórica, narrativa y espacial con la nación española ¿qué mal hay? Nada, excepto para los tarados. Lo malo es que los tarados quieren, como dije, identificar 'España' con 'España franquista'. Si esto fuera cierto (pero es mentira) ser 'españolista' sería lo mismo que ser 'franquista', lo que es falso. En fin, todo su discurso (por decir algo) es pura incoherencia y falsedad. No pierda tiempo discutiendo con ellos.
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