¿SERÁ VERDAD?

6/9/2008.

Según el semanario Época

Afirman que el PSOE pactó con UM la inmunidad judicial de Maria Antònia Munar y otros cargos de su formación

-- 6 Septiembre 2008

Palma (LB).- El PSIB-PSOE podría haber pactado con Unió Mallorquina (UM) la inmunidad judicial de la hasta hace pocos meses presidenta de este último partido político, Maria Antònia Munar, así como de otros miembros de la misma formación que también desempeñaban cargos en el Consell de Mallorca durante la pasada Legislatura, a cambio de obtener la llave de la gobernabilidad de la Comunidad Autónoma balear en junio del año pasado.

Así lo afirma el semanario de actualidad política y social Época, en su edición lanzada hoy, en la que destaca el reportaje ‘Los amigos fiscales del PSOE en Baleares’, que ocupa un total de cuatro páginas, y en el que se expone que “cada vez existen pruebas que contribuyen a alimentar la teoría de que el PSOE gobierna las Islas Baleares a cambio de inmunidad judicial a su socio de Ejecutivo”, según cita el primer párrafo de la información.

Concretamente, esta publicación dirigida por Carlos Dávila –quien dirigió y presentó el espacio de tertulia ‘Mira lo que hay’ de IB3 hasta que fue suprimido en agosto de 2007, tras la entrada del nuevo director del ente, Antoni Martorell (UM)–, señala que tal acuerdo “no podría llevarse a cabo sin la colaboración de los jueces” y, así, afirma que la Fiscalía Anticorrupción “hacía la vista gorda” con las irregularidades de Munar al frente del Consell insular.

Igualmente, Época –cuya última edición ya se ha agotado en algunos quioscos del centro de Palma– destaca que la ex líder de UM, que ahora detenta la presidencia del Parlament balear, se decantó en su momento por la propuesta de pacto post electoral del PSOE, a pesar de que del PP era más ventajosa, ya que el hasta entonces presidente de la Comunidad Autónoma, Jaume Matas, le ofreció la presidencia, la alcaldía de Palma y de nuevo el Consell, mantiene la publicación.

Sin embargo, Munar habría preferido un “retiro dorado”, en el que no supusieran ninguna amenaza los procesos judiciales por presuntas irregularidades durante su gestión, por la venta en 2005 de un solar público de 52.000 metros cuadrados en Palma por 30 millones de euros, cuando estaba tasado por el doble; y por repartir cuatro millones de euros en subvenciones a asociaciones culturales “fantasma” lideradas por militantes de UM.

Aún cabe agregar otras irregularidades, igualmente apuntadas por Época, y que no han desembocado por el momento en condenas, como el cobro de comisiones (15%) en la recalificación del polígono de Son Oms –junto al Aeropuerto de Son Sant Joan–, que afectaron a otros cargos de Unió Mallorquina pero no a Maria Antónia Munar, a la que “nadie pide cuentas”, sostiene la publicación.

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• A nadie, absolutamente a nadie, le ha sorprendido, las “revelación” del semanario Epoca sobre el presunto pacto entre el PSOE y Munar para garantizar la “inmunidad” de la política uemita: más que un secreto, era una comidilla a voces- casi un clamor- en la sociedad mallorquina, en los medios de comunicación y en los ambientes políticos. El impacto del reportaje de Epoca radica en que los ciudadanos han visualizado, por vez primera y en letra impresa, lo que era un run-run generalizado. La novedad, pues, no es lo que se dice, sino que se haya publicado.

• Es, ni que decir tiene, un asunto gravísimo en la medida que, de ser cierto, cuestionaría, de forma radical, la legitimidad de todos los pactos que la izquierda ha suscrito para hacerse con el poder. Y, desde luego y de confirmarse la especie, situaría al PSOE y a sus socios en el mismo plano de indecencia y de corrupción que Epoca otorga a UM. Más: se trataría de la suprema corrupción posible en una democracia al alterar las reglas del juego para alcanzar el gobierno en prácticamente todas las instituciones autonómicas. Tan es así, que el inteligente periodista proclive a los socialistas, Miquel Payeras, ha reaccionado rápidamente afirmando lo absurdo de cualquier “pacto” entre Munar y Antich que garantizara la “inmunidad” de la primera: es el único que ha captado la gravedad de lo publicado por Epoca. No quiero ser malévolo, pero conviene recordar que, históricamente, el PSOE, fue el único partido que, en la República, intentó un golpe de estado porque había perdido unas elecciones. O sea, que los antecedentes no son, ciertamente, alentadores.

• Por lo demás, es cierto- y en este sentido la prensa independiente no ha cesado de subrayarlo- que las apariencias, las formas y los métodos que se han utilizado para perseguir los casos de corrupción protagonizados por políticos del PP han mostrado, de forma escandalosa, la existencia, por lo menos, de dos varas de medir en función de quién protagonizaba un caso de corrupción. En este sentido, la denuncia de Epoca va a misa y abona, por lo menos indiciaria y sintomáticamente, la doble vara de medir

• A ver que pasa, porque lo que resultaría más escandaloso aún- digno de un “¡váyase, señor Antich! ¡Váyase señora Munar!- que no pasara nada en un sentido u otro. A ver que dicen. (Antonio Alemany)