viernes, 27 de noviembre de 2015

LADRONES.

 (Pero son ladrones muy especiales porque los que han sido robados- los españoles- hemos tenido que soportar la irresponsable inacción de nuestros representantes políticos. Con todo mi desprecio.)

 LADRONES.

20.000 MILLONES DE EUROS GASTADOS EN LA AVENTURA SECESIONISTA CATALANA

El diario ABC ha publicado un informe que eleva a cerca de 4.000 millones de euros la cantidad despilfarrada directamente por Arturo Mas en su obsesión secesionista. Algunas cifras resultan especialmente escandalosas. 

El principal aparato de propaganda soberanista -es decir, la televisión y la radio públicas de Cataluña- ha supuesto unas pérdidas de 1.736 millones de euros sufragados por la Generalidad.

 Arturo Mas ha dedicado además 389 millones a premiar a medios de comunicación privados que defienden el independentismo. Los procesos electorales, las subvenciones culturales y deportivas, las demenciales embajadas, la colocación incesante de parientes, amiguetes y paniaguados afines en organismos públicos han consumido el resto del dinero derrochado por el presidente marioneta de Oriol Junqueras al servicio de la aventura secesionista.

Estudios de máxima solvencia publicados en El Imparcial elevan a 20.000 millones de euros lo que en los últimos doce años ha derrochado la Generalidad directa e indirectamente en la causa de la independencia, es decir la tercera parte de la actual deuda catalana. Un porcentaje no desdeñable del despilfarro económico secesionista ha sido sufragado, para mayor inri, por las subvenciones del Estado a la Generalidad.

A contrarrestar la desmesurada campaña soberanista ni el Gobierno de Zapatero ni el de Rajoy han dedicado un solo euro. La pasividad, la ligereza, la lenidad han presidido la acción no solo del líder socialista, sino también del popular. Y así nos luce el pelo. El error, el inmenso error político e histórico nos ha sumido en la actual situación. La gran política consiste en prevenir, no en curar. Por no haber previsto a tiempo lo que podía ocurrir hay que aplicar ahora una terapia que puede producir reacciones de consecuencias incalculables.
 
(Luis María Ansón/El Imparcial.)

2 comentarios:

Arcoiris dijo...

Son una máquina de quemar dinero, el nuestro, el de los aborrecidos españoles, para alimentar su sueño independentista. Todo se sacrifica para ese desideratum. El menor de mis hijos cobró cuatro días una pequeña subvención por su incapacidad laboral. Imagino que muchos otros necesitados han perdido sus ayudas oficiales porque esas criaturas quieren la secesión a toda costa. Y es bien cierto que nuestros políticos son claros cómplices de este y otros procesos potenciales o más o menos sofocados. ¿Acaso era tan difícil pronosticar las consecuencias necesarias del bisagrismo? ¿Es que no cabía esperar que los partidos nacionalistas engendrarían más pronto que tarde sus bastardos separatistas, que serían tan consecuentes con sus ideas como lo es el PSOE, que heredó de Franco una Andalucía con un paro del 20% y han conseguido doblar esa tasa en tan sólo treintaitantos años?
Y, sin sonrojo, se llaman a sí mismos “servidores públicos”. ¡La madre que los ..., esto …, (¿cómo dice el reniego?)!

Sebastián Urbina dijo...

Esperemos que Ciudadanos tenga un buen resultado y pueda condicionar la política española. Si no es así, creo que la situación general se va a deteriorar a gran velocidad con peligrosas consecuencias.