viernes, 11 de marzo de 2011

CUANDO LAS BARBAS DE TU VECINO...








La agencia de rating ha decidido hoy rebajar la calificación crediticia a largo plazo de cuatro regiones españolas, después de haber recortado ayer el de España hasta hasta 'AA2' desde 'AA1'. Además, la perspectiva sigue siendo "negativa".

En concreto, Moody's ha bajado el rating de Castilla-La Mancha a 'A2' desde 'A1'; el de Cataluña a 'A3' desde 'A2'; el de Murcia a 'A1' desde 'Aa3' y el de la Comunidad de Valencia a 'A2' desde 'A1'.

Al mismo tiempo, Moody's ha reafirmado los ratings en 'Aa2' con "perspectiva negativa" de Andalucia, Castilla y León, Extremadura, Galicia y Comunidad de Madrid. También ha mantenido la calificación del País Vasco, de Aa1, con perspectiva negativa.

La agencia rebajó también la calificación del ayuntamiento de Barcelona y el Instituto Valenciano de Finanzas y mantuvo la del Consorcio de Transportes de Vizcaya.

Las elecciones no ayudarán

La rebaja de hoy, refleja, según Moody´s, las desviaciones de las cuatro regiones respecto al límite del déficit fijado para 2010 y las "dificultades subsecuentes que Moody´s anticipa que encontrarán para controlar su déficit y su deuda en 2011-12". Además, explica la agencia, la decisión refleja la debilidad en el manejo presupuestario en los últimos años, como han mostrado las poco fiables previsiones presupuestarias.

Por otro lado, la agencia "reconoce que estas regiones han comenzado a implementar medidas de recorte de costes", pero han fallado a la hora de rebajar los gastos en línea con la reducción de ingresos producida en 2010. Como resultado de esto, estas regiones se han desviado de los objetivos sentados por el Gobierno.

Además, dados los déficits registrados en 2010, la agencia afirma que el grado de consolidación fiscal requerido para alcanzar el 1,3% exigido para 2011 no tiene precedentes. Más aún, las elecciones de mayo en Castilla-La Mancha, Murcia y Valencia no van a ser propicias para el lanzamiento de reformas estructurales, especialmente las relacionadas con el sistema sanitario y el educativo.

La perspectiva negativa de las cuatro comunidades, por su parte, refleja por un lado las pobres perspectivas de crecimiento del conjunto de España, lo que seguirá afectando a la recaudación impositiva; y por otro, la incertidumbre asociada a la capacidad de las comunidades para cumplir con sus compromisos de deuda a un coste aceptable en un contexto de tensiones en el mercado.

País Vasco

Por lo que respecta al País Vasco, que mantiene su calificación en Aa1, Moody's señala la elevada autonomía fiscal con la que opera el Gobierno regional gracias al concierto vasco, que le permite desarrollar una eficaz política fiscal y no depender tanto como otras regiones de las transferencias del Gobierno central.

También destaca los aceptables niveles de deuda del gobierno vasco y su probada capacidad presupuestaria, que se han deteriorado desde el comienzo de la crisis pero que Moody's considera que volverán a niveles aceptables en los próximos dos o tres años. Además, las necesidades de financiación del País Vasco continuarán siendo asumibles.

La perspectiva negativa, añade la nota, obedece a las lentas perspectivas de crecimiento a medio plazo del PIB en España, así como a las dificultades de acceso al mercado de crédito para el conjunto del país. (El.economista.es).


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OPRESIÓN SIN REMISIÓN.


Después de los negativos informes de Moody's sobre cuatro regiones españolas, incluida Cataluña (aunque Cataluña es una nación y faro de Occidente) he tenido ocasión de hablarlo con algunas personas.


Les aseguro que he hablado (no discutido) con personas que tienen estudios universitarios. Me me han dicho que las dificultades económicas de Cataluña se deben al expolio de Cataluña por parte de España.

Para el que tenga dudas, este es un ejemplo (entre muchos) de los perversos efectos del adoctrinamiento catalanista durante los últimos treinta años. En las escuelas, universidades, televisiones, radios, prensa y lo que haga falta.

El que no diga 'lo que toca', es un mal catalán, un españolista de mierda. o un anticatalán. Usted elige.

No exagero ni un ápice.

Sebastián Urbina.

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