La sensatez de UPyD.
UPyD.
Palma,
28 de enero de 2013
Las
mancomunidades de municipios de Mallorca como entes ineficientes que cuestan
mucho dinero a los ciudadanos. Este es el desolador mapa que dibuja Unión,
Progreso y Democracia (UPyD) en Baleares, una situación que el partido
magenta lleva denunciando desde hace tiempo.
Juan Luis Calbarro, portavoz de UPyD en las Islas, toma como ejemplo la
disolución de la Mancomunitat Sud, formada por los municipios de Felanitx,
Santanyí, Ses Salines y Campos, cuyos alcaldes “se han rendido finalmente a la
evidencia: el mantenimiento de estas estructuras tan ineficientes resulta
demasiado caro”.
Sin
embargo, a pesar de presentar una situación muy parecida o incluso peor, el
resto de alcaldes se aferran obstinadamente al mantenimiento de las
mancomunidades. “Un caso especialmente sangrante es el de la Mancomunitat de
Tramuntana -señala Calbarro- donde a los problemas de inviabilidad se suma la
situación de conflicto abierto entre municipios de diferente signo político. Un
despropósito que nos sale demasiado caro a los ciudadanos de Baleares.”
Fusión de municipios y eliminación de las mancomunidades
Según
UPyD, la clave para acabar con esta situación insostenible pasa
irremediablemente por emprender un proceso de fusión de ayuntamientos.
“Suprimiendo los municipios pequeños e integrándolos en estructuras mayores se
conseguiría un ahorro considerable que mejoraría la calidad de los
servicios de sus habitantes, a la vez que permitiría sanear las cuentas
públicas y rebajar la presión fiscal a los contribuyentes”.
Un
mapa municipal racional y equilibrado como el que reclama la formación magenta haría
innecesaria la existencia de las mancomunidades, con lo que el gasto
público se reduciría todavía más: “no tiene sentido que localidades con muy
poca población cuenten con costosas estructuras municipales y que haya que
recurrir a la creación de estructuras superiores (las mancomunidades) para
gestionar ciertos servicios”.
Calbarro
advierte que “por desgracia, se manda un mensaje engañoso a los ciudadanos
diciendo que reduciendo la cifra de municipios se reducen también los servicios
que se prestan a los vecinos o incluso que se amenaza la identidad o la misma
existencia de cada uno de los pueblos de las islas, algo absolutamente falso. Los
que envían estos mensajes catastrofistas simplemente buscan mantener sus caros
chiringuitos burocráticos sostenidos con dinero público”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario