PRESUPUESTOS CAIB.

La Conselleria de Economía presenta la cuenta de resultados del año 2008 con un desfase presupuestario de 626 millones de euros.

UPyD Baleares exige una mayor responsabilidad en la elaboración y gestión de los presupuestos de la

Comunidad Autónoma

UPyD censura los presupuestos generales de la CAIB recientemente aprobados, pese a la intención de ajustarse mejor a la actual recesión que los de 2009.

7 de diciembre de 2009. Palma.

Visto el cierre de los Presupuestos de 2008 de la Comunidad Autónoma de Baleares, se reconoce un desfase de 626 M €, lo que representa multiplicar por tres lo sucedido en 2007. UPyD considera que lo mismo ocurrirá en los presupuestos de 2010, por los siguientes motivos:

1. No incluir en la escandalosa diferencia entre lo presupuestado y lo gastado, las deudas a proveedores, ni los créditos negociados para ellos (el “confirming” en 2009 ya supera los 100 M €), lo que incrementa las diferencias entre el déficit presupuestado y el real en el orden de 1/3 de los ingresos totales.

2. No consolidar los desfases presupuestarios de las empresas públicas, que arrastran una deuda superior a los 1.200 M €.

3. Incrementar, pese a pomposos anuncios, en un 8% las transferencias, nóminas y subvenciones.

4. Reducir, a pesar de los lloriqueos al Estado y del sudoku de la financiación autonómica, los impuestos de responsabilidad propia en 285 M €, mientras que la recaudación estatal (IVA e IRPF) se ha incrementado en 115 M €,

5. Aprobar créditos a corto plazo por 314 M €, y a largo plazo por 489 M €, cifras que sin duda aumentarán al cerrar 2009, y, con ello, extraer capacidad crediticia del sistema productivo generador de empleo (el denominado efecto crowding out), para financiar los desfases entre el déficit previsto y el real.

6. Reducir los fondos propios y anular prácticamente la tesorería y, por lo tanto, repercutir sobre los proveedores la morosidad y poner en riesgo los salarios de los funcionarios.

No se pueden adelantar las diferencias entre lo presupuestado y los ingresos y gastos reales de 2010, pero visto lo sucedido en 2008 y el empeoramiento de la situación en 2009, el Gobierno de Antich, inmerso en su realidad virtual, ha perdido su credibilidad.

En tiempos de dificultades, UPyD apoya las políticas de cobertura social e inversión pública, aunque sea incrementando el déficit hasta los límites permitidos legalmente; sin embargo, no entiende para qué sirve una Ley de Presupuestos si se aprueba para no ser cumplida, que no impide el incremento de hecho de los gastos corrientes, que dificulta la creación de empleo compitiendo con la empresa privada por el escaso crédito, que huye de costes electorales por gestionar los impuestos de responsabilidad autonómica, que maquilla los desfases deficitarios, que carga en los proveedores parte de su financiación y que la única gestión que realiza es la ocultación de déficit real y el desvío de dinero a organismos satélite.

La palabra que mejor resume a juicio de UPyD la situación presupuestaria de la CAIB, es IRRESPONSABILIDAD. Es difícil, pero puede hacerse peor, como sucedió en la Ley de Presupuestos de 2009, aunque también puede hacerse mejor: viviendo en la realidad y considerando que los ciudadanos son personas inteligentes y responsables dispuestos a remar juntos en momentos difíciles, en vez de tratar de engatusarlos con subvenciones, victimismos, maquillajes, retórica y promesas, con tal de seguir en los despachos hasta la próxima grieta del Pacto.