miércoles, 2 de julio de 2008

AUTOENGAÑO.


2/7/2008.


AUTOENGAÑO.



TRECE MIL MENORES OBLIGADOS A COMBATIR

Terroristas de las FARC han secuestrado a trescientos niños desde 1996

La Policía de Colombia tiene documentados unos trescientos casos de secuestros de niños y niñas perpetrados por los terroristas de las FARC desde 1996, de acuerdo al último informe de la Dirección de Antisecuestro y Antiextorsión. Y es que la violencia que azota al país sudamericano se ensaña con los menores. Cifras de la Defensoría del Pueblo apuntan a que en los últimos diez años 6.140 niños y niñas reclutados por las FARC, ELN y los paramilitares murieron en combate. La UNICEF asegura que actualmente, hasta trece mil menores permanecen enrolados, la mayoría contra su voluntad, en los grupos terroristas colombianos.


Conozco a individuos de diferente sexo y condición, de los que usualmente se dice que son 'buenas personas', que hablan de las FARC, por ejemplo, como grupos guerrilleros. ¿Es que acaso no lo son? Es una manera de esconder la realidad. Algo parecido a lo que decían casi todas las radios y televisiones (progres, por supuesto) al hablar de los terroristas de Irak. Desalmados que ponían bombas en colegios y autobuses y asesinaban a un núnero indeterminado de personas. A estos monstruos se les calificaba de 'insurgentes'.


La izquierda, en general, es terriblemente sectaria. Su estupidez, creo, le viene de ahí. Si mezclamos su enfermizo sectarismo con la idiotísima creencia en su superioridad moral, ha de salir un auténtico 'tonto del haba'. ¡Hay gente que no es así!, protestará alguno. Y es cierto. Conozco a gentes de izquierda que no son así. Pero son una minoría. Salvando las distancias (me temo que no muchas) sucede algo parecido con los nacionalistas. Conozco a unos pocos con los que me hablo normalmente y vamos a comer juntos, sin que suceda nada desagradable. Pero son una excepción.


Todo esto viene acuento porque hace un cierto tiempo califiqué, de pasada, a las FARC de 'narco-terroristas' y una persona que no quiero nombrar puso una cara rarísima. Como diciendo: '¡Menudo facha!


¿Tienen remedio? Depende. Si son jóvenes tienen más tiempo para cambiar pero, generalmente, no escuchan. Todo lo más, oyen. Sus mentes sectarias se comportan como un frontón. Repelen lo que les dices. No hay una reflexión y una larga digestión. ¿Para qué? Atesoran la verdad verdadera (o dicen- o creen- que son el sujeto histórico de la revolución) y son moralmente superiores. Es un virus pernicioso.


La referencia a las FARC puede extenderse a otros ámbitos. Una de las batallas progres es la de los alimentos trangénicos. Ahí, como siempre, cabe todo. Desde que el capitalismo quiere matarnos, hasta que nos quiere poner enfermos para vender más medicinas. En cambio, Paul Collier, que dirige el Centro de Economías Africanas, en la Universidad de Oxford, no opina igual.

Pregunta. Los transgénicos levantan ampollas.

Respuesta.

El miedo de los europeos a la ciencia ha sido manipulado por el lobby agrícola para conseguir una nueva forma de proteccionismo. La prohibición de importar alimentos transgénicos conlleva un cruel efecto secundario: los gobiernos africanos temen no poder exportar sus productos y también están prohibiendo los transgénicos.


Sebastián Urbina.


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