25/7/2008.

CRISIS ¿QUÉ CRISIS? (tercera parte)

El Gobierno constata el fracaso de su política económica al bajar al 1,6% el PIB de este año

F. CORTÉS/S. GUIJARRO

MADRID. La crisis económica se le ha escapado de las manos al Gobierno. Si aun quedaba alguna duda, los datos hechos públicos ayer son la prueba del nueve. El paro se desbocó durante el primer semestre del año, con un aumento de 207.000 personas, con lo que el número de desempleados se sitúa en los 2,381 millones, una cantidad que no se conocía desde finales de 2000. Y a renglón seguido, para concentrar las malas noticias económicas prevacacionales en una sola jornada, el vicepresidente Solbes presentó las nuevas previsiones para la economía española, que sitúan el crecimiento del PIB para este año en el 1,6%, lo que supone meter un tijeretazo de siete décimas a la anterior estimación (el 2,3%), que, a su vez, ya había sido revisada desde el 3,1% original. La previsión para 2009 también fue recortada y fijada en un 1%.

Para expertos consultados por ABC, lo más preocupante quizá no sean las cifras, sino el hecho de que, pese a la avalancha de malos datos, el Gobierno mantenga su discurso de que esto es normal, que el ajuste está a punto de terminar y que, sin necesidad de aplicar medidas de corrección más allá de las intervenciones cosméticas ya conocidas, la situación económica volverá a sus cauces a mediados del año que viene. Para estas mismas fuentes, sin embargo, la nueva revisión a la baja de la previsión de PIB es un reconocimiento tácito de que las medidas aplicadas no van a dar ningún fruto concreto.

Los datos de desempleo y el nuevo cuadro macroeconómico provocaron la inmediata reacción de partidos, patronales y sindicatos, que reclamaron la adopción urgente de medidas para hacer frente a la situación de crisis.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, mostró su preocupación y aseguró que España se enfrenta «a la peor crisis desde el año 1993». Por ello, afirmó que es «urgente» adoptar medidas para recuperar la confianza de los inversores y para darle un horizonte y una salida a los agentes económicos y sociales, que son los que tienen que generar empleo, fundamentalmente las pymes, que emplean al 80% de los trabajadores, y no pueden acceder al crédito porque es más caro, según subrayó. Durante la conferencia que pronunció en un curso de verano en San Lorenzo de El Escorial, a Rajoy se le preguntó sobre el dato de la Encuesta de Población Activa, y el líder del PP explicó que, con una tasa de paro del 10,44%, España tiene el segundo peor dato de los 27 países de la Unión Europea, tan sólo superada por Eslovaquia. Por ello, consideró que la cifra del paro es «muy preocupante».

La patronal CEOE señaló que «los resultados del mercado laboral corroboran que la economía española se encuentra en una situación de crisis, que obliga a todos los poderes públicos a coordinar los esfuerzos para crear unas condiciones que favorezcan la recuperación de la actividad de las empresas y, por tanto, del empleo».

Por su parte, CC.OO. reclamó al Gobierno y a las Administraciones que impulsen actividades más productivas y aseguren la protección frente al paro. El sindicato dirigido por José María Fidalgo mostró su preocupación por «la negativa evolución del empleo», al tiempo que subrayaba que «la economía no es capaz de generar empleo para todas las personas que quieren trabajar».

Desde UGT, se señaló que «ante la actual situación, es urgente adoptar medidas concretas como la modernización de los Servicios Públicos de Empleo y el Plan de Medidas de Orientación, Formación Profesional e Inserción Laboral».

USO explicó que «la crisis ha llegado y empieza a mostrar su peor rostro, que es el importante crecimiento del desempleo. A todo ello se suma la falta de actuaciones del Gobierno, que todavía no ha aplicado ninguna medida efectiva para paliar el crecimiento de nuestra tasa de paro».

La Federación de Autónomas ATA resaltó que los trabajadores por cuenta propia se habían reducido en 31.200 desde principios de año.