Balanzas comerciales: Cataluña nos vende justo el doble de lo que nos compra
Cataluña le compra anualmente al resto de España (datos de 2005) por importe de 30 mil millones de euros. Y nos vende productos por importe de más de 50 mil millones. ¿Qué hacemos con los 20 mil millones de euros que tiene Cataluña de superávit en la balanza comercial, les decimos a los catalanes que se los coman?(Batiburrillo. Economía)
Ventas de Cataluña al resto de España. Fuente del cuadro estadístico: C-intereg
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Martes, 12-08-08
La Generalitat mantiene el pulso contra el Gobierno y las comunidades autónomas socialistas en materia de financiación y, en respuesta a los toques de atención del PSOE, acusó al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero de «intimidar y amedrentar». La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, no pierde comba y volvió a llamar al orden al Ejecutivo de José Montilla exigiendo «responsabilidad».
Fue el consejero de Economía, el socialista Antoni Castells quien contraatacó en esta ocasión asegurando que sus compañeros de filas «chillan y hacen ruido para que no se oigan los argumentos de los que los tenemos. Es su especialidad de la casa, de Madrid, del Gobierno del Estado y de las fuerzas políticas españolas». Esta referencia a la españolidad del partido es todo un salto cualitativo, en el discurso del PSC, que no hace un mes compartía abrazos y sonrisas con Zapatero durante su congreso.
El berrinche catalán ante el incumplimiento del Estatuto, que marcaba el 9 de agosto como plazo límite para sentar las bases de un nuevo modelo de financiación, tuvo el máximo exponente el pasado viernes, cuando el presidente José Montilla acusó a Zapatero de consentir «privilegios disfrazados de solidaridad».
Una expresión que irritó a las comunidades gobernadas por los socialistas, como Andalucía y Galicia, que no están dispuestas a que sea precisamente Cataluña la que resulte privilegiada con límites a la solidaridad interterritorial, cesión de impuestos y relaciones de exclusividad con el Estado.
La contundente respuesta de De la Vega, quien reprobó a Montilla por su «exceso verbal», provocó que ese frente catalán formado por el tripartito y CiU arropara a Montilla, aunque en el caso de los nacionalistas, ese apoyo tenga un trasfondo partidista: el de exprimir al máximo las contradicciones socialistas y permanecer al acecho ante cualquier atisbo de claudicación del presidente catalán a las presiones del PSOE.
En este sentido, el presidente de CiU, Artur Mas, instó al dirigente catalán de pasar de las palabras a los hechos y comprometerse a no votar los Presupuestos Generales del Estado en 2009 si no se cumplen las previsiones estatutarias. De ese posible veto a los Presupuestos se hablará en la tradicional reunión que Montilla mantiene anualmente con los diputados y senadores del PSC, y que en esta ocasión tendrá lugar el 4 de septiembre.
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Ya se lo advirtió José Montilla a José Luis Rodríguez Zapatero en la clausura del último Congreso de los socialistas catalanes: "Habrás leído que he dicho que a veces te he dado problemas, y que seguiré haciéndolo si viene el caso", le espetó entre aplausos de su militancia. "Quien te quiere, te hará sufrir", añadió.
Y vaya si se lo está haciendo pasar mal el presidente de la Generalitat. La feroz presión del PSC de vincular su apoyo a los Presupuestos Generales de 2009 al modelo de financiación autonómica ha levantado en armas al resto de comunidades gobernadas por el PSOE. La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los socialistas ha sido la alianza de Montilla con sus enemigos de CiU para hacer un frente común contra Zapatero.
Los socialistas de Galicia, Andalucía y Cantabria (aquí gobierna el PRC en coalición con el PSOE) han sido los primeros en estallar públicamente y dirigirle unos cuantos mensajitos al líder del PSC. Emilio Pérez Tourillo (presidente de la Xunta), José Antonio Grillán (vicepresidente segundo de la Junta andaluza) y Miguel Ángel Revilla (presidente del Gobierno cántabro) han sido los encargados de recordarle a Montilla que el reparto debe basarse en los principios constitucionales de igualdad y solidaridad entre todos los españoles. "Lo que no podemos hacer bajo ningún concepto es avanzar por una senda que rompa la igualdad de todos los españoles", le advirtió públicamente Grillán.
Fernández De la Vega, de apagafuegos
Con las espadas en alto, y ante la ausencia del presidente (de vacaciones en Doñana) es María Teresa Fernández de la Vega quien se está encargando de intentar detener el fuego cruzado entre los catalanes y el resto. Y eso que está a miles de kilómetros de España, en los últimos coletazos de su gira iberoamericana.
La vicepresidenta mandó un aviso a navegantes al recordar que ambas negociaciones son cosas distintas, y que eso no va a cambiar. "La seriedad y la responsabilidad llevará a todos los grupos políticos a distinguir lo que es una negociación que persigue determinar de forma estable cómo llevar más recursos y mejor a las comunidades autónomas en el futuro", señaló el declaraciones a la cadena SER. "El PSC es un partido responsable, que ha acreditado esa responsabilidad a lo largo de toda su historia, y estoy segura que va a seguir siendo responsable como lo ha sido siempre", añadió.
Lo que no dijo es si Zapatero tiene pensada alguna medida de fuerza para hacer que su discípulo catalán sea responsable, como le pide Fernández de la Vega. (ElSemanalDigital)
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Ya se lo advirtió José Montilla a José Luis Rodríguez Zapatero en la clausura del último Congreso de los socialistas catalanes: "Habrás leído que he dicho que a veces te he dado problemas, y que seguiré haciéndolo si viene el caso", le espetó entre aplausos de su militancia. "Quien te quiere, te hará sufrir", añadió.
Y vaya si se lo está haciendo pasar mal el presidente de la Generalitat. La feroz presión del PSC de vincular su apoyo a los Presupuestos Generales de 2009 al modelo de financiación autonómica ha levantado en armas al resto de comunidades gobernadas por el PSOE. La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los socialistas ha sido la alianza de Montilla con sus enemigos de CiU para hacer un frente común contra Zapatero.
Los socialistas de Galicia, Andalucía y Cantabria (aquí gobierna el PRC en coalición con el PSOE) han sido los primeros en estallar públicamente y dirigirle unos cuantos mensajitos al líder del PSC. Emilio Pérez Tourillo (presidente de la Xunta), José Antonio Grillán (vicepresidente segundo de la Junta andaluza) y Miguel Ángel Revilla (presidente del Gobierno cántabro) han sido los encargados de recordarle a Montilla que el reparto debe basarse en los principios constitucionales de igualdad y solidaridad entre todos los españoles. "Lo que no podemos hacer bajo ningún concepto es avanzar por una senda que rompa la igualdad de todos los españoles", le advirtió públicamente Grillán.
Fernández De la Vega, de apagafuegos
Con las espadas en alto, y ante la ausencia del presidente (de vacaciones en Doñana) es María Teresa Fernández de la Vega quien se está encargando de intentar detener el fuego cruzado entre los catalanes y el resto. Y eso que está a miles de kilómetros de España, en los últimos coletazos de su gira iberoamericana.
La vicepresidenta mandó un aviso a navegantes al recordar que ambas negociaciones son cosas distintas, y que eso no va a cambiar. "La seriedad y la responsabilidad llevará a todos los grupos políticos a distinguir lo que es una negociación que persigue determinar de forma estable cómo llevar más recursos y mejor a las comunidades autónomas en el futuro", señaló el declaraciones a la cadena SER. "El PSC es un partido responsable, que ha acreditado esa responsabilidad a lo largo de toda su historia, y estoy segura que va a seguir siendo responsable como lo ha sido siempre", añadió.
Lo que no dijo es si Zapatero tiene pensada alguna medida de fuerza para hacer que su discípulo catalán sea responsable, como le pide Fernández de la Vega. (ElSemanalDigital)
3 comentarios:
La balança comercial és mercantil: do ut des.
La balança fiscal, no. Catalunya no rep res a canvi de la "solidaritat".
Usted (como cualquier otra persona) tiene el derecho a plantear las cosas así. Pero los demás pueden hacerlo de otra manera. En las relaciones internacionales es usual que e que concede un préstamo, por ejemplo, obligue a invertirlo, al menos en parte, en los productos del país que concede el préstamo.
Dado que los catalanistas tienen reticencias, niegan o desprecian ser españoles ¿por qué deberíamos tratarles como tales? En consecuencia, una opción sería: si usted quiere que le siga comprando sus productos quiero A) y B) a cambio.
Por otra parte, lo normal, en las sociedades democráticas actuales, es que las personas con más renta transfieran parte de ella para beneficiar a las personas con menos renta. De forma indirecta. Con las precisiones que sean necesarias. Por supuesto Cataluña no da ni recibe. Es sólo una forma de hablar y no hay que confundirse. Los alemanes (y de otros países con mayor nivel económico) llevan años transfiriendo renta a europeos de otra naciones. Han llorado pero no han chantajeado. Y eso que no eran 'sus nacionales'. En fin, cuando se discute se puede poner parte, o todo, sobre la mesa. Según convenga.
Por cierto, los primeros que fomentaron el boicot a los productos españoles fueron los catalanistas del Omnium Cultural, subvencionado por la Generalitat.
Una solidaridad que espera recibir a cambio de la misma, no es solidaridad. Es interés interesado. Lo que está bien para La Caixa. Estoy convencido de que esta actitud (victimismo) es perjudicial para los catalanes, en general. Pero no espero convencer a los catalanistas. Sólo escribo por si me leen los indecisos.
Cuando los habitantes de Barcelona se den cuenta de lo 'solidarios' que son con alguna otra provincia catalana ¿qué se les podrá argumentar para no empiecen a quejarse por ello?
Normalmente, cuando uno escupe "p'arriba", le cae en la frente. Y si no, tiempo al tiempo.
Una vez abierta la espita, el proceso es imparable.
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