LAS MENTIRAS DEL GOBIERNO SOBRE LA RETIRADA DE KOSOVO.
El Gobierno ha intentado disimular la pifia de anunciar la retirada de las tropas españolas de Kosovo sin haberlo comunicado previamente a la OTAN y a los aliados con una cadena de mentiras.
En primer lugar, la ministra de Defensa, Carme Chacón, precisó que la decisión tenía la rúbrica de “todo el Gobierno”. Sin embargo, la jugada es unilateral. Zapatero dio luz verde al viaje a Kosovo de la ministra para el anuncio de la medida sin el conocimiento de Moratinos, que se oponía a la retirada de tropas.
Bernardino León, secretario general de Presidencia y uno de los principales responsables de la política exterior, reconoció que se tuvieron que encoger de hombros cuando, reunidos en el Departamento de Estado de EEUU, supieron de la noticia. Preguntado por si una explicación de las causas de la marcha de Kosovo hubiera evitado la polvareda, León respondió: “Sin duda alguna, se habría evitado”.
En segundo lugar, Chacón defendió que la decisión “la conocían todos los aliados”. Horas antes, el embajador de España en la Alianza Atlántica, Carlos Miranda, había transmitido al ministro de Asuntos Exteriores el “disgusto” y la “irritación” de EEUU y del secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, “sorprendidos” por lo precipitado y unilateral del anuncio.
Rajoy ha espetado a Zapatero este miércoles en la Cámara Baja que "Chacón sólo quería salir en el telediario”. Efectivamente, y como confirman fuentes consultadas por este periódico, la ministra tenía grabadas unas declaraciones para los informativos antes de comunicar la noticia a los soldados, con el fin de que un hipotético retraso en el vuelo impidiera que la información pudiera llegar para los telediarios desde Kosovo”.
Tanto por el mal trago de la diplomacia española en Washington como por una retirada de Kosovo ante la que EEUU reconoció sentirse “profundamente decepcionado”, Rodríguez Zapatero no debe mostrarse tan optimista en su relación con Obama como declaró cuando el demócrata fue investido presidente. Por lo pronto, los primeros contactos mantenidos entre uno y otro gobierno para fijar una reunión se dedicaron a Kosovo -Bernardino León se disponía a negociar un encuentro entre Obama y Zapatero- y, en segundo lugar, España no ha sido elegida como destino del presidente estadounidense en la que será su primera gira europea.
A esto hay que añadir el coste económico que supondrá para España la retirada de tropas. Con esta medida, el plan de estímulo de la economía norteamericana a la que podían optar empresas españolas, por el que se felicitó hace pocas fechas Miguel Sebastián, puede venirse abajo, con unas consecuencias que podrían traducirse en una pérdida de 52 millones de euros para estas compañías. (ElImparcial)
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