Decisiones como la del Tribunal de Estrasburgo, que permiten la excarcelación de setenta y siete delincuentes muy peligrosos, que, además, contradicen las decisiones del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional español;
los repetidos comentarios de una institución tan importante y conocida como la BBC, diciendo que se reirán de Jesucristo las veces que les apetezca, pero nunca de Mahoma, y que han tratado a los terroristas de ETA como 'luchadores por la libertad de Euskadi';
los repetidos comentarios de Amnistía Internacional hablando de ETA como si no fuera una banda terrorista y, por tanto, no utilizando la expresión 'banda terrorista' y otros muchísimos delirantes desvaríos de la mayoría de los políticos tradicionales, de gran parte de la prensa progre, es decir, de la prensa; de buena parte de los jueces progresistas, que mayoritariamente lo son, y un larguísimo etcétera que da pereza comentar, favorecen la aparición y el fortalecimiento de partidos radicales.
Esto ya ha sucedido en Francia. Maríe Le Pen está teniendo un gran éxito electoral. Algo parecido ya sucede en Austria, Holanda y Noruega. En este último país, un partido, al menos tan radical como el de Le Pen, ya está en el gobierno de Noruega. Creo que es solamente el principio.
¿A qué se debe? Yo creo que una de las principales causas está en el comportamiento de la mayoría de los políticos tradicionales, mayoría de los medios de comunicación, y diversidad de instituciones, aquejadas de un progresismo, estúpido e irresponsable, que alimenta una indignación y una reacción de cada vez más fuertes.
Sólo un ejemplo entre muchos. Que una repugnante terrorista, que ha cometido veintitrés (23) asesinatos, cumpla veinticuatro años de cárcel (24), gracias a la muy progresista decisión del Tribunal de Estrasburgo, provoca mucha indignación. Este es el caldo de cultivo.
¡Cuidado! Es muy peligroso.
PD. A usted, ciudadano. Pase olímpicamente de lo 'políticamente correcto'. No tenga miedo.
Si usted respeta la dignidad de los demás, y respeta las típicas reglas del juego democrático, no debe tener ningún miedo a las opiniones y descalificaciones de la maloliente progresía. Sea valiente. No les haga ni. p. caso.
PD.
Ha votado a favor de la etarra asesina,
López Guerra, el magistrado del PSOE en Estrasburgo.
Cada uno en su sitio. Cada oveja con su pareja, como dijo el gran líder socialista Rubalcaba. ¡Vote progreso! ¡Vote socialismo!)
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