¿ES ESTO LO CORRECTO?

EFE

El titular del Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid ha puesto en libertad a Rafael G.F., conocido como "El Rafita", acusado del presunto intento de sustracción, el pasado jueves, de un automóvil en el barrio madrileño de Hortaleza.

Según han informado fuentes judiciales, en el curso de su declaración ante el juez, "El Rafita", quien se enfrenta al cargo de robo de uso de vehículo, ha negado su participación en los hechos.

La Policía Nacional le detuvo el pasado jueves después de que varios agentes sorprendieron a tres individuos que intentaban robar un vehículo en el distrito de Hortaleza. Uno de ellos fue detenido y los otros dos lograron fugarse, aunque los agentes reconocieron entre ellos a "El Rafita", que fue localizado y arrestado.

"El Rafita" estuvo implicado cuando tenía catorce años en el asesinato de Sandra Palo, la joven de Getafe que fue hallada carbonizada el 17 de mayo de 2003 tras ser violada, atropellada y quemada viva.
El 27 de enero pasado la Comunidad de Madrid e Instituciones Penitenciarias llegaron a un acuerdo en virtud del cual Prisiones se hace cargo del control de la pena de libertad vigilada del joven. Con este arresto, el Rafita ya ha sido detenido por diversos delitos en cuatro ocasiones en tan sólo ocho meses.

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TO ER MUNDO E GÜENO

El mundo occidental en el que vivimos establece principios penales de garantía para los delincuentes y principios de defensa social para defender a la sociedad. En mi opinión, un exceso de garantismo (que es lo que sucede en España, gracias a los gobiernos progresistas) conduce a una defensa social débil e insuficiente. Produce alarma social. Es lo que hemos visto, repetidamente, por televisión. Los joyeros de Madrid (como pueden ser de otro sitio) protestan porque los mismos delincuentes que les han asaltado la joyería están en libertad a los dos días. Y repiten el asalto a las joyerías. Y es solamente un ejemplo entre muchos.

En el otro extremo tenemos una 'defensa social' exagerada (soy consciente de la vaguedad de las palabras que utilizo, pero no intento escribir un libro) que pone en peligro las garantías típicas de las sociedades democráticas hacia los que violan la ley.

¿Por qué en España enfatizamos fuertemente el garantismo judicial? No es nuevo. La izquierda cree (en general) que los delincuentes son unas víctimas de la sociedad. ¿Qué sociedad? La sociedad capitalista. Este tipo de sociedad genera pobreza y exclusión social. Es decir, 'provoca' la delincuencia porque no da una salida digna a la gente o a buena parte de la gente. Produce sonrojo que digan esto, dados los ejemplos del 'socialismo realmente existente'. Pero tienen mucha caradura y se creen moralmente superiores.

Concepción Arenal decía: "Odia el delito, compadece al delincuente". En una línea parecida estaba el penalista Dorado Montero. Pero el problema no es éste. Cualquier persona sensata 'odia' el delito. Solamente un enfermo está encantado con los delitos. Por otra parte, tampoco se trata de 'odiar' a los delincuentes. Se trata de detenerles, juzgarles y, en su caso, condenarlos a cumplir una determinada sanción. De lo que se trata es que la sanción no sea considerada un insulto por la sociedad.




Pondré un ejemplo extremo, pero hay muchos otros que, sin llegar a esta ofensiva situación, son socialmente inaceptables. Se trata del asesino De Juana Chaos. Asesinó a 25 (veinticinco) personas y cumplió 18 (dieciocho) años de cárcel. Ni siquiera un año por persona asesinada. Esto es un insulto a la sociedad y a los familiares y amigos de las víctimas.




Lo que sucede, en mi opinión, es que la sociedad española, en general, es progre. Sólo así se explica que votara ¡por segunda vez! a Rodriguez Zapatero. En esta misma línea, de progresismo a la violeta, somos (son) blandos con los asesinos, comparativamente hablando. Por eso el dictador Fidel Castro no está mal visto porque es un dictador 'de izquierdas'. Pinochet sí. Porque es un dictador 'de derechas'. Con estos niveles de estupidez ¿qué se puede esperar?




En conclusión. La responsabilidad no es solamente de los políticos 'progresistas'. Es de la gente que les vota. Alguno dirá que las cárceles no reinsertan. Por supuesto. Hago dos sugerencias. La primera es que la gente acepte invertir mucho más dinero en la cárceles. Para que no haya hacinamiento. Para que haya más funcionarios de prisiones, bibliotecas, lugares para el ocio y la diversión, etcétera. Y, de este modo, sea más factible la reinserción.



La segunda sugerencia es que los que no están de acuerdo, reciban en sus casas a un delincuente para ayudar a su reinserción. Se les podría subvencionar con una ayuda económica mensual para sufragar los gastos de manutención, lavado de ropa y otras menudencias.


El que diga que hay que eliminar las cárceles, o es un imbécil o un bromista sin gracia. Las personas adultas saben que hay que lidiar con la realidad real. No confunden deseos y realidad. Esto queda para los niños. O para los demagogos sin escrúpulos.


Sebastián Urbina.