¿Acabará Egipto en una dictadura islámica?
08:33 (05-02-2011) | (La Gaceta)
Nieves Paradela, profesora de Estudios Árabes en la UAM: "El verdadero peligro son los autócratas árabes". Rafael L. Bardají, director del departamento de Internacional de FAES: "Los únicos bien organizados son los Hermanos Musulmanes". Para participar, vote en www.gaceta.es.
Nieves Paradela, profesora de Estudios Árabes en la UAM: "El verdadero peligro son los autócratas árabes".
1. No, porque la revuelta que se está produciendo en Egipto no ha sido ni iniciada ni fomentada por ninguna organización islamista. Es un movimiento animado por jóvenes –la mayoría nacidos bajo el larguísimo régimen de Mubarak– que protestan por la pobreza y la falta de democracia. Al igual que en muchos otros países árabes, Internet, los blogs, los chats y las redes sociales han creado un espacio de información libre fundamental para las revueltas.
2. No, porque los Hermanos Musulmanes (la única organización islamista con implante en Egipto) no representa al islamismo radical o yihadismo. En origen fue un movimiento creado en 1928 como contrapunto a las varias corrientes de ideario laico y liberal que triunfaban por entonces en Egipto. Aunque aspiran a la creación de un ambiguo “estado islámico”, podrían tener acomodo en un sistema democrático y pluralista como partido de ideología ultraconservadora.
3. No, porque el verdadero peligro son los autócratas árabes que han gobernado con mano férrea los estados árabes desde las posindependencias. Ninguno de ellos ha dudado en aliarse con los movimientos islamistas más conservadores –mientras daban una apariencia de modernidad y prooccidentalismo–, bien para obtener una cierta legitimidad social, nunca ganada en las urnas, bien para frenar a los sectores más contestatarios de pensamiento laico y de izquierda.
4. No, porque incidir machaconamente en el riesgo de una deriva islamista peligrosa implica no entender lo que está pasando y contribuir a desactivar la fuerza y la razón de estos movimientos de cambio democrático. Reparemos en quién está azuzando este espantajo: Mubarak, sin ir más lejos.
Rafael L. Bardají, director del departamento de Internacional de FAES: "Los únicos bien organizados son los Hermanos Musulmanes".
1. Sí, porque aunque es fácil pensar que el fervor popular despertado en el Gran Oriente Medio representa una revolución democrática como la de 1989 en el bloque soviético –el ansia de libertad es común para todos–, ahí se acaban las similitudes: lo que ha empezado como la marea que derribó el muro, tiene las de convertirse en el tsunami de 1979, cuando Jomeini se hizo con el poder e instauró en Irán una república islamista fundamentalista.
2. Sí, porque Mubarak es un cadáver político por mucho que quiera aferrarse al poder. Además, el Ejército egipcio no es demócrata por naturaleza, sino que busca un control autocrático en la estabilidad. No se puede permitir el lujo de unas elecciones libres que causen la división social del país.
3. Sí, porque los grupos laicos, por falta de apoyo internacional, son bolsas marginales y la única organización bien estructurada es aquella de los Hermanos Musulmanes. Es más, la Casa Blanca le ha dado nuevos bríos al decir que el nuevo Gobierno tiene que contar con ellos.
4. Sí, porque El Baradei es una falsa esperanza. Laico sí, pero también en estrecha connivencia con quien le ha estado pagando durante años: el Irán de los ayatolás. Y a río revuelto en Oriente Medio, ganancia de los iraníes. No en balde es Al Yazira, su fiel instrumento, quien más está haciendo por echar a Mubarak. Ni democracia ni poder militar duradero. Lo que se avecina es una fase inestable en la que los islamistas irán jugando sus cartas hasta convertirse en el poder real. En febrero de 1979 Jomeini no era el líder de la revuelta contra el sha. Lo logró meses después cuando acabó con todos los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario