lunes, 17 de febrero de 2014

LA CULPA ES DEL NACIONALISMO ESPAÑOL.


 (Visto lo que atreven a decir destacados 'intelectuales' catalanes, hay que preguntarse qué es lo que mejor representa el catalanismo indpendentista, el burro o la cabra?


PD. Con perdón de estos simpáticos animalitos.)







LA CULPA ES DEL NACIONALISMO ESPAÑOL.

¿El responsable del independentismo? ¿Del anuncio de un referéndum ilegal por parte del Gobierno catalán? Y añadamos, ¿Del incumplimiento de las sentencias del Supremo sobre el castellano como lengua vehicular? ¿Quizá incluso del sospechoso enriquecimiento de los Pujol y de la corrupción?: el nacionalismo español.

El anterior, el argumento de que la culpa del independentismo es del nacionalismo español, es de un escritor llamado Javier Cercas, muy representativo de un importante sector intelectual de Cataluña (“La razón sin razones (2)”) Tal cual, sin la más mínima vergüenza intelectual por escribir tamaña estupidez, comparable a la de atribuir a los partidos centristas el aumento del extremismo o a los favorables a la integración de los inmigrantes el aumento de la xenofobia o a los partidarios de la igualdad de sexos el aumento del machismo. Y Cercas ya va por el segundo capítulo en El País Semanal con la anterior autojustificación de su incapacidad para abrir la boca frente al nacionalismo en Cataluña.


No es nuevo, ocurre cada semana, pero si es esperable que la tontería salga del discurso populista de algunos políticos, no deja de llamar la atención que lo haga de la pluma de escritores importantes que deberían guardar un mínimo de recato en sus argumentos. Para que no se note tanto que la razón profunda es su incapacidad para criticar al nacionalismo catalán en un lugar como Cataluña donde tal pronunciamiento provoca problemas, incluso aislamiento social.



Por supuesto, Cercas llama nacionalismo español a la posición del PP. Y nos quiere convencer de que es equivalente a  un nacionalismo catalán que aboga por la ruptura de Cataluña, que no quiere un Estado autonómico, que impide el uso del castellano como lengua vehicular de la enseñanza y que no respeta los sentimientos compartidos de españolismo y catalanismo con un nacionalismo español, el de la derecha española y una buena parte de la izquierda, que quiere la unidad con Cataluña, que respeta el Estado autonómico, que quiere el bilingüismo en la enseñanza y que respeta los sentimientos compartidos de españolismo y catalanismo.


El profundo problema de Cataluña es precisamente lo que ocurre con Cercas y muchos como él, su pánico a levantar la voz frente al nacionalismo. Y que sólo se atrevan a hacerlo los del PP o Ciutadans, o algunos empresarios, cada vez más, o esos padres que combaten en solitario para que se cumplan las leyes en la enseñanza. Mientras los intelectuales exquisitos como Cercas buscan excusas, el nacionalismo español sobre todo, para seguir mirando hacia otro lado.

(Blog Edurne Uriarte.)

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