martes, 1 de febrero de 2011

QUE SE VAYAN











SE NOS ESTÁ AHOGANDO PREMEDITADAMENTE.
Dos años. Eso es lo que espera el Gobierno de la Generalitat de Cataluña para comenzar a salir de la crisis. El presidente catalán, Artur Mas, que ayer por la mañana se entrevistó con el Rey Juan Carlos, hizo llegar por la tarde al Gobierno central un plan estratégico elaborado por sus técnicos en las últimas semanas y que contempla la reducción del déficit al 1,3% para el 2011 (actualmente está en el 3,6%, casi 7.000 millones de euros) y un recorte de los presupuestos de este año del 10%. El tema será tratado a fondo por el propio Mas y el presidente José Luis Rodríguez Zapatero el próximo lunes. Sin embargo, para poder levantar la economía con dicho plan estratégico la Generalitat pone determinadas condiciones. “La aceptación de este plan es incuestionable -señalaron a El Confidencial fuentes del Gobierno catalán-. Madrid ha de tener en cuenta que Cataluña es el motor económico de España. Y si nos empobrecemos nosotros, se empobrece España. De ahí que en las previsiones se recorte un 10% el presupuesto del 2011 en relación al 2010 y se prevea que, como mínimo, no disminuyan los ingresos. Pero Madrid ha de cumplir sus compromisos y pagar lo que dice la ley”. El portavoz de Convergència i Unió (CiU) en el Parlamento catalán, Jordi Turull, abunda en las mismas tesis. “Hemos llegado a un punto inaguantable. Se nos está ahogando premeditadamente. Y es una provocación que, encima que incumplen las leyes, lo que dice el Estatuto e incluso la aportación al Fondo de Competitividad para las comunidades productivas, no se permita endeudarse a algunos Gobiernos. El expolio de Cataluña es más que evidente”, manifestó Turull a El Confidencial. Turull señala también que “el déficit fiscal de Cataluña se sitúa entre 17.000 y 20.000 millones de euros. Es decir, es lo que nosotros pagamos y que no vuelve. Y las instituciones europeas han dejado bien claro que el dinero aportado a las arcas del Estado por los territorios no debería sobrepasar el 4% del PIB. Todo lo que pase de este porcentaje, ha de considerarse expolio fiscal. Y ese déficit se sitúa, en Cataluña, entre el 9 y el 10%. Por tanto, hay una situación claramente injusta”. De momento, sin embargo, la estrategia de Artur Mas es intentar conseguir que el Estado aporte lo mismo que el año pasado a las arcas catalanas, a la espera de poder plantear un pacto fiscal el próximo año, con un nuevo Gobierno salido de las urnas en las elecciones legislativas. “El pacto fiscal, similar al concierto económico aunque con algunas variantes, es irrenunciable para CiU -afirma Turull-. Hasta ahora, Madrid no ha cumplido los puntos del Estatuto ni siquiera en los presupuestos generales de este año; consignó los 1.000 millones que había en el Fondo de Competitividad. La financiación que había pactado el anterior Gobierno de la Generalitat tampoco se cumple. En esta situación, no nos quedaremos con los brazos cruzados si el próximo Ejecutivo rechaza cumplir las leyes y sigue ahogándonos. Porque ahogar económicamente a Cataluña es impedir el despegue económico y social del país”. Las espadas están en alto. De esta forma, Las condiciones para reflotar la economía son que el Estado también reduzca su déficit, apretándose el cinturón como ha hecho Cataluña; que el Gobierno central ingrese en las arcas catalanas lo mismo que en el 2010; y que se permita un “endeudamiento controlado y riguroso, como había pedido el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell”, cuentan desde la Generalitat. Si se garantizan estas peticiones, se podría conseguir el objetivo de reducir el déficit al 1,3%, por lo que “se darían las condiciones necesarias para comenzar a salir de la crisis económica. Existen algunos indicadores que apuntan a que vamos por el buen camino”.(A.Fernandez/El Confidencial)

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