miércoles, 20 de mayo de 2015

ENCRUCIJADA HISTÓRICA

 (No es sólo Francia. Hay una tendencia a ignorar lo que somos, la identidad europea, las ideas y valores que han construido Europa a lo largo de siglos.


Son preguntas clásicas que no deberían tomarse a la ligera. ¿De dónde venimos? ¿Adónde vamos?


Si los ciudadanos europeos no tenemos una idea aproximada de cómo queremos ser, cómo queremos vivir y qué está bien y qué está mal, nos espera un futuro espantoso.


O despertamos, o estamos condenados a desaparecer. Con más o menos velocidad, con más o menos conflicto, sufrimiento y violencia.

No es broma.)






ENCRUCIJADA HISTÓRICA.

Miles de maestros y profesores salieron este martes a las calles de Francia para pedir la «revisión» o retirada del proyecto de reforma de la enseñanza que debiera aplicarse el próximo curso en los collèges, los institutos que imparten lo que en España sería la ESO.

 Los sindicatos, ex ministros socialistas y conservadores, historiadores e intelectuales coinciden en sus críticas de fondo contra el proyecto concebido por la titular de Educación, Najat Vallaud-Belkacem, que estima que su reforma vendrá a «remediar la desigualdad y la injusticia». 

Por una vez, los sindicatos de izquierda coinciden con la crítica liberal conservadora. Jean d’Ormesson, patriarca de la literatura francesa de nuestro tiempo, ha publicado en «Le Figaro» una carta abierta al presidente, François Hollande, en la que denuncia la reforma como una «amenaza global» y una forma de «empobrecimiento». Adjetivos repetidos, con pocos matices, en las manifestaciones de ayer, donde las pancartas repetían: «¡Queremos una enseñanza de calidad!». «¡Esta reforma devalúa la enseñanza nacional!».

El propio Hollande, sin embargo, salió ayer en defensa del proyecto. «La reforma debe garantizar a la vez el éxito de todos y la excelencia, que no es un privilegio, es un derecho», señaló desde Berlín el jefe del Estado francés, reafirmando así la intención de seguir adelante con la reforma.

Los puntos esenciales del enfrentamiento son la «autonomía» de los institutos, la enseñanza «interdisciplinar», el puesto de la historia nacional en la enseñanza, el riesgo de «desaparición» del latín y el griego, las «amenazas» sobre el alemán, y el puesto de las asignaturas troncales.

«Autonomía» de los centros

El proyecto de la ministra de Educación tiene previsto conceder a los institutos la «autonomía de gestión» sobre un 20% del tiempo escolar. Para los sindicatos, esa autonomía es una «amenaza» para la igualdad y el modelo de «instituto único». A juicio del Gobierno, ese margen de «autonomía» permitiría «liberar iniciativas locales o regionales». Los sindicatos estiman, por el contrario, que se trata de una «falsa autonomía» que abre la puerta a todo tipo de «arbitrariedades» locales y regionales

Se trata de un enfrentamiento de fondo entre el Gobierno, que desea «descentralizar» e incrementar la «autonomía» de los institutos, y los sindicatos, partidarios de un modelo educativo clásico y centralizado.

Más islam en la historia

El puesto de la historia y otras asignaturas troncales es el punto capital de la oposición política. El proyecto propone «revisar» el «relato» de la historia nacional. El Gobierno considera que la historia de Francia debe «enriquecerse» desde una óptica «pluridisciplinar», integrando nuevas «perspectivas» como la historia de la colonización y las religiones (el islam). Se trata de un punto esencial, denunciado por historiadores y antiguos ministros socialistas.

Pierre Nora, el más grande de los especialistas en la identidad nacional, ha comentado: «En su estado actual, el proyecto es un reflejo fiel de la crisis de identidad que atraviesa Francia, una de las más graves de su historia. El proyecto es la expresión de una Francia fatigada de sí misma, la expresión de un país que no sabe de dónde viene ni a dónde va».

Así mismo, Regis Debray, consejero de François Mitterrand y antiguo compañero del Che Guevara, declara: «El proyecto es la expresión fiel de la incultura histórica de nuestros gobernantes». Por su parte, Jean-Pierre Chevènement apunta: «El presidente Hollande desconoce el carácter específico de nuestras escuelas e institutos, que son una institución de la República, el Estado, y no una yuxtaposición de escuelas e institutos imponiendo cada cual su propio proyecto local».

Asignaturas troncales fragmentadas

La situación en que queda el conjunto de las asignaturas troncales, fragmentadas, divididas y enseñadas, en el proyecto, a través de una óptica «pluridisciplinar» es objeto de las más vivas críticas, por parte de los sindicatos y los intelectuales.

Los profesores de alemán temen que su disciplina «desaparezca» o que «sumergida» en una enseñanza «pluridisciplinar» que, a su modo de ver, «diluye» la educación básica. El abandono del carácter «lineal» y «narrativo» de la historia (política y religiosa) para adoptar puntos de vista «pluridisciplinares» es percibido como un «riesgo inquietante». Michel Onfray, filósofo izquierdista, comenta sobre esta fragmentación: «El islam obligatorio, el Siglo de las Luces facultativo... Michel Houellebecq estará contento. En otro tiempo, la escuela y los institutos enseñaban a leer, escribir y contar. No es el caso hoy, cuando la escuela y los institutos enseñan los despojos de las teorías del género y la programación informática».

Para Luc Ferry, filósofo, liberal-conservador y ministro de la Educación con Jacques Chirac: la enseñanza de la historia es «un desastre nacional». «Entramos en el buenismo y la moralina, cuando lo que necesitamos es una buena cronología que nos permita comprender la sucesión de acontecimientos», advierte.

El griego y el latín, en riesgo

El riesgo de la desaparición del griego y el latín, víctimas de un ostracismo apenas disimulado, es percibido por unos y otros como una «amenaza global». Pascal Bruckner, ensayista, comenta: «Se abandona el griego, el latín y el alemán, para dar la palabra a los humoristas “multiculturales” que nos enseñan la ignorancia». En la gran manifestación de París, jóvenes franceses negros, educados en barrios periféricos, estaban en la «vanguardia» de la defensa del griego y el latín, con citas de Catón y otros clásicos latinos.

Día 20/05/2015 - (ABC)

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Será esto, la tribu y la ignorancia el Nuevo orden Mundial? O el plan de fin de la sociedad occidental tal como la conocemos para convertirnos en una amalgama de amorfos sometidos al caciquillo puesto, consumiendo todos lo mismo...
La noticia unida a lo de las hordas islámicas da pavor.