sábado, 23 de mayo de 2015

MEDIOCRIDAD











MEDIOCRIDAD.

Etienne de la Boétie, amigo de Montaigne, decía:

'El pueblo ha renunciado a la libertad y, acosado por el miedo, prefiere entregarse a las arbitrariedades de los favores y los privilegios que el poder absoluto dispensa entre los que le sirven.'



Esto sucedía en una sociedad en la que no había, como ahora, garantías democráticas. Por insuficientes que sean, ahora las hay, no como entonces. ¿Cuál es la excusa para tanta cobardía y miedo?


Aunque no son los únicos casos, los llamativos se han producido en los 'territorios comanches'. Ya saben, si no se manifiesta claramente a favor de los separatistas catalanes puede ser acusado de 'españolista'. Es la 'muerte civil', o el ostracismo. O el desprecio. O la coacción. En el País Vasco puede ser peor.


Así triunfan las minorías agresivas y sin escrúpulos. Y se imponen a las mayorías silenciosas.




Nada es más fértil que el arte de ser libre, pero nada es más duro que el aprendizaje de la libertad’.
Alexis de Tocqueville.


 

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