(Con este aval de votos no pueden ni modificar su propio Estatuto. Pero dicen estar legitimados para proclamar la independencia en contra de las leyes democráticas vigentes y de las leyes internacionales.)
RECORDEMOS:
Votos emitidos a favor de la independencia: 1.900.000.
Votantes censados: 5.500.000.
Votos totales emitidos: 4.100.000.
Catalanistas totalitarios.
27-S, NI FRENO NI MARCHA ATRÁS.
Esta es la
historia. La historia de un mundo paralelo, de un mundo construido sobre la
base de negar la realidad, los hechos, los datos. Sistemáticamente. De manera que da igual que ahora unos
comicios arrojen pérdida de escaños para los que se juntaron para tener más, y
que haya que sumar a las CUP para que salgan las cuentas y los cuentos.
Da igual que haya que marchar hacia la proclamación de la independencia con el aval
de un millón novecientos mil votos
de los 5,5 millones de votantes censados o de los 4,1 millones que en efecto
votaron.
Es la voluntad de
un pueblo, porque el pueblo en la visión nacionalista son los
nacionalistas y nadie más.
(Cristina
Losada/ld.)
¿ES EL CATALANISMO UN FASCISMO?
EN PRINCIPIO, no
tiene por qué serlo. El pensamiento y el sentimiento no delinquen. Uno puede
sentirse catalán y no español y desear la independencia de Cataluña y la
subsunción de Baleares en la nación catalana. Es legítimo y al margen de
acuerdos o desacuerdos, nada cabe objetar. El problema surge cuando los
pensamientos y sentimientos se transmutan en ideología en su acepción de
representación de principios y valores, con voluntad totalizadora y operativa
en la praxis política de la sociedad y con el objetivo de legitimar estos
principios y valores. Dicho con
otras palabras y para entendernos: el peligro surge cuando pensamiento y
sentimiento de concretan en un proyecto y en una acción política.
Es
entonces cuando hay que pasar la ideología por el tamiz crítico integrado por
ios valores dominantes de una cultura y una sociedad. Y es tras este análisis
crítico cuando ponderaremos el carácter democrático o antidemocrático,
totalitario, autoritario o liberal de una ideología Esto es lo que se propone
respecto del catalanismo este articula Hay una amplia y excelente bibliografía
sobre las tipologías totalitarias en el mundo occidental. Desde Trotski y
Víctor Serge hasta Aron, Bataille, Sturzo, Simone Weil, Hayek, Popper o nuestro
Juan Linz hasta llegar a la gran Hannah Arendt que magistralmente abre unas
nuevas perspectivas sobre el totalitarismo en dos libros capitales: Los
orígenes del totalitarismo y Eichmann en Jerusalén, el primero un bisturí
diseccionador de la etiología y génesis del totalitarismo y el segundo un
escalofriante análisis de la «banalización del mal» como presupuesto
explicativo de la instalación del totalitarismo en la sociedad.
Esquemáticamente, se pueden sintetizar los rasgos que
definen el fascismo, una indiscutible versión del totalitarismo, en los
siguientes términos: a) sacralización de la nación que reclama
una cohesión política, social, étnica o lingüística (catalanismo); b)rechazo de los derechos y libertades
individuales que se transfieren a la tribu (catalanismo) que se autolegitima
para castigar al disidente que no comparta sus principios (catalanismo); c) establecimiento de una neo-lengua
unitaria y uniformadora (catalanismo) y una neohistoria que reescribe la
Historia a la búsqueda de un modelo mítico que define la pertenencia gregaria a
una tierra, a una lengua, a una cultura (catalanismo); d) un victimismo histórico que precisa de
una humillación-la derrota militar de Alemania en la guerra del 14, Felipe V y
el decreto de Nueva Planta- para legitimar el nacionalismo totalitario: no
puede haber nacionalismo totalitario sin el otro como enemigo (catalanismo)
; e) exaltación de la violencia
que se justifica en nombre de los agravios recibidos (catalanismo) ; y f) deriva imperialista que aspira a
la integración de los vecinos en la unión mística nacionalista (países
catalanes).
El encaje de la praxis política del catalanismo
balear en estos rasgos definitorios del fascismo resulta tan sorprendente como
significativo. Por ejemplo, a) la translación de los derechos y
libertades de los ciudadanos a un ente abstracto como es la lengua que es el
equivalente de la etnia para el nazismo o el abertzalismo vasco como icono
referencial de la nación: los padres y los alumnos no tienen derecho a elegir
la lengua de la enseñanza, sino que es la lengua -el catalán- la que impone su
derecho a los ciudadanos; b) fuera
del catalanismo no hay salvación posible, ni siquiera para ejercer la medicina:
la condición de «buen catalán» deviene conditio sirte qua non para acceder al
trabajo, para ejercer el comercio o para obtener una subvención; c) ningún castellanoparlante exige a un
catalanoparlante que hable o escriba en castellano, ni le afea que no utilice
una de las lenguas cooficiales: al revés sí ocurre y todos los días; d) el proyecto catalanizador del Govern es
un impresionante proyecto totalizador que aspira a conformar a los ciudadanos y
a la sociedad en los «valores catalanes» que previamente ha definido la tribu:
ninguna parcela de la vida social escapa a esta focalización totalizadora del
catalanismo gubernamental; e) todo
ciudadano, empresa o entidad será castigada y excluida de las subvenciones
públicas si no se expresa en catalán; f) el
«buen mallorquín», devenido «buen catalán», es título que se adquiere a través
de la satanización de España que deberá ser insultada y despreciada; g) la tribu penetra capilarmente en la
enseñanza para formar a los «nuevos catalanes» con un sanedrín, politburó o
Consejo Nacional del Movimiento -la Universidad balear- que garantiza la pureza
de la neolengua; h) no se
conocen episodios de violencia protagonizados por no catalanistas: las
agresiones en la Universidad, el boicot a conferenciantes, las quemas de
banderas, las amenazas de muerte a los que defienden las libertades -Círculo
Balear, alcalde de Calvià-proceden exclusivamente del catalanismo que asume la
única violencia política existente en nuestras islas; i) la
sublimación de la nación catalana son los países catalanes, un Camelot sólo
existente en las enfebrecidas mentes catalanistas; y j) la
significativa diferencia entre dos manifestaciones, la una -catalanista- que
reclama la imposición de una sola de las lenguas cooficiales, la otra -la
convocada por el Círculo Balear- que apuesta por el bilingüismo y la
convivencia de las dos lenguas.
Resulta
descorazonador que la autonomía tan fervorosamente acogida por la ciudadanía
haya servido para consagrar una sociedad cerrada, autista y aherrojada por un
catalanismo excluyente, totalitario y antipático que, un día sí otro también, o
nos riñe o nos insulta o se empeña en hacernos pasar por sus horcas caudinas. O reacciona
a tiempo la sociedad civil apostando por la sociedad abierta, plural e
integradora o acabaremos protagonizando esta «banalización del mal» que hizo
posibles los monstruos totalitarios. ¿Hay que tolerar, en nombre de la
libertad, la intolerancia y a los que propugnan destruir las libertades usando
y abusando de la tolerancia liberal? Esto es lo que se debate en la
manifestación del sábado.
1 comentario:
El catalanismo es una inmensa mentira, fundamento de todo totalitarismo, de la que se aprovechan unos sacamantecas. Ni el territorio es suyo ni lo es nada de nada, es más no es de ningún español, es un legado conjunto. Nadie tiene derecho a decidir sobre lo que no es suyo. Y si pretende hacerlo, se le pone en sus sitio, por la vía de los hechos. Basta de gentuza inculta y manazas, encima el catalanismo es un robo que opera en todos los órdenes, cultural, histórico, folclórico y material. Se adueñan los castellets, el arte religioso aragonés y ahora
!las telas de llengües mallorquinas! eso vi el otro día en Cataluña. No aman a España, pero todavía aman menos Cataluña. No les interesa su espíritu real, su ser histórico. Sus protagonistas son gentecilla que en realidad no son más que homonets.
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