viernes, 13 de noviembre de 2009

CAZURROS.







CAZURROS.

¿Qué le ha pasado al FC Barcelona para acabar en manos de esta pandilla de cretinos? Esta vez me refiero al último exabrupto de Xavier Sala i Martín, vicepresidente del club y amiguito del alma de Juanito Laporta:

“Se ha conseguido el mejor, el más catalanista, el más global y más exitoso Barça de la historia. Creo que esto debe seguir y yo contribuiré. Todas los personas que se llaman independentistas acaban perseguidos y maltratados, se llamen Oleguer, Joel Joan o Laporta. Pero, por otro lado, los españoles son tan cazurros que te quitan las ganas de ser unionista (…). Y está el tema fiscal. Dinero no es que no produzcamos, sino que se lo llevan a Madrid”.

Dejando a un lado el ridículo y trasnochado lenguaje que usan normalmente los independentistas (¿pero qué cojones es eso de unionista en la España del siglo XXI?), habría que aclarar a este sujeto unas cuantas cosas que, pese a ser tan obvias, merecen ser repetidas: Lo primero, que el Barça es mucho más grande e internacional que sus Païssos Catalans; lo segundo, que no debe mezclar deporte y política porque haciéndolo lo único que consigue es perjudicar al club cuyos intereses dice defender; y por último, que cualquier persona que ocupe un cargo de representación y responsabilidad está obligada a comportarse de manera educada y respetuosa hacia los demás, porque al no hacerlo no solo se degrada a sí mismo sino a la entidad que representa.

Hay una explicación para estas continuas provocaciones y salidas de tono: Endiosamiento y afán de protagonismo. Seguro que detrás de estas acciones subyace algún complejo de inferioridad, un trauma infantil (¿le llamaban gordo en el cole?), carencias afectivas, frustraciones… Lo cual por cierto también explicaría las horteras americanas con las que solemos ver a este individuo. Una persona normal no iría vestido así cada día si no es para llamar la artención. Eso, o que quizá tenga este señor vocación de payaso.

Yo no me considero tan cerrado de mente como estos sembradores profesionales de discordia, trepas de tres al cuarto, así que lejos de generalizar, no diré que todos los catalanes son “cazurros”, porque es falso e injusto. Catalanes los hay buenos, malos, inteligentes y estúpidos. Hasta los hay como Xavier Sala i Martín: maleducados y cazurros. Con americana de colores y enarbolando la senyera, pero cazurros a más no poder. (Daniel Terassa)

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