Probablemente, usted ya sabe que los nacionalistas, con las honrosas excepciones de rigor, son gilipollas . Entre otras encomiables virtudes que provocan la admiración y el respeto de todos. Pero si, todavía, no lo sabe, da igual.
La lectura del libro, aquí citado, le proporcionará gozo y tristeza a un tiempo. Gozo, porque las impagables chorradas nacionalistas le provocarán la risa. Tristeza, porque el odio, la estupidez y el fanatismo de los nacionalistas ha provocado, y provoca, grandes males a España y a los españoles. Con otras palabras, un cáncer que avanza peligrosamente, a menos que le paremos los pies.
Léalo. Disfrute. Y tome nota. Son un peligro para España y para la democracia. Aunque pacten con ellos populares y socialistas, debido, en parte, a la nefasta ley electoral. Si todavía no se ha enterado es que lo suyo no tiene remedio. Está dispuesto a dejarse engañar. En este caso, no hay nada que hacer.
Por contra, yo sugiero que no pretenda ser políticamente correcto. Ya lo han sido muchos políticos del Partido Popular. O sea, lamentablemente acomplejados, a los que no disculpo en absoluto. Por no hablar del PSOE. Es, todavía, peor. Pues sí, esto es lo que hay, con las honrosas excepciones de rigor. Para hacer buenas reformas, antes hace falta un buen inventario.
Desde Santurce a Bizancio
Jesús Laínzediciones Encuentro.
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