LIBERTAD A LA CATALANA.
La ‘cuestión catalana’ continúa levantando ampollas. Pero no sólo entre quienes apoyan la vía soberanista (o el pacto fiscal) y el resto del Estado; también, en el seno de las propias élites catalanas. El presidente de CEOE, Juan Rosell, ha ordenado aplazar un acto que se iba a celebrar hoy mismo en Barcelona en el Círculo de Economía (presidido por el exministro Josep Piqué) para presentar un informe sobre la viabilidad de Cataluña fuera de España. Se da la circunstancia de que el informe ha sido realizado por el Instituto de Estudios Económicos (IEE), dependiente, precisamente, de la patronal CEOE.
De hecho, José Luis Feito, uno de los vicepresidentes de los empresarios españoles y máximo responsable del Instituto de Estudios Económicos, iba a participar en el acto. Feito dijo durante la presentación del informe en Madrid que una hipotética independencia de Cataluña sería “inviable” por razones monetario-financieras. O lo que es igual, el nuevo Estado no podría formar parte del Eurosistema, que es quien ha salvado a España y a otros países europeos de la bancarrota.
El estudio del IEE es extremadamente crítico con la posible secesión, y ya fue presentado hace unos meses en Madrid, inmediatamente antes de las últimas elecciones catalanas. Ahora, sin embargo, Rosell lo ha frenado en seco para no interferir en un acto convocado para el próximo día 14 por Fomento de Trabajo -la patronal catalana-, que va a convocar ese día a la plana mayor de la economía del Principado.
El acto -denominado Anem per Feina-, algo así como ‘Manos a la obra’, reunirá a lo más granado del empresariado catalán, pero Rosell no ha querido chafarlo, según las fuentes, para evitar roces con la patronal catalana. Y es así como los organizadores del acto se han quedado sin presentación apenas unas horas antes de la convocatoria, cuando ya estaban giradas las invitaciones. El acto, al final, se celebrará, pero después del día 14.
La convocatoria de Fomento, en todo caso, está marcada por la polémica. Lo que iba a ser un acto unitario de todo el empresariado catalán ha ido perdiendo fuelle. Hasta el extremo de que tanto la Cámara de Comercio de Barcelona como la patronal Pimec, o el propio Círculo de Economía, han anunciado que no acudirán. Detrás de estas bajas están las diferentes maneras de observar el proceso político catalán. Mientras que unos han acusado a Joaquim Gay de Montellà, el presidente de Fomento, de politizar el acto y plantearlo como un gesto reivindicativo, otros consideran que no se defiende de manera clara la vía soberanista.
El acto de Fomento está pensado para apoyar el pacto fiscal y el diálogo entre Barcelona y Madrid, de manera que se evite lo que Gay de Montellà ha denominado “choque de trenes”. La Generalitat ha presionado a organizaciones como Pimec o la Cámara de Comercio para que se desmarquen del acto, que no encaja con la actual agenda política de la Generalitat, marcada por la consulta secesionista que los empresarios catalanes ven con mucho recelo.
Independentistas
El caso más llamativo es el de Pimec, una patronal de la pequeña y mediana empresa muy vinculada a los sectores más tradicionales de CiU como los comerciantes, que han excusado su asistencia porque, en su opinión, el acto ha dejado de ser “un acto unitario de afirmación empresarial”. O dicho en palabras de alguien que conoce bien los entresijos de las patronales catalanas, no va a tener ese carácter soberanista ideado inicialmente.
De hecho, y ante la menor asistencia, los organizadores han trasladado la convocatoria a la sede de Fomento (más pequeña), mientras que, al mismo tiempo, el manifiesto final apenas tendrá referencias de carácter político. CiU ha conseguido rebajarlo para intentar que no quede en evidencia la distancia cada vez más grande entre la Generalitat y la mayor parte del empresariado catalán. (El Confidencial.)
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