PARTITOCRACIA

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   (Probablemente, los únicos partidos no aquejados de los males partitocráticos sean UPyD y Ciudadanos. O en grado muy inferior a los restantes partidos. Hay que hacer algo más que gestionar la salida de la crisis económica. Porque la crisis, es más que una crisis económica.)
  
  
  
  
   PARTITOCRACIA.
  
  
  El eurodiputado popular Alejo Vidal-Quadras habla claro en su blog, Prohibido pisar las flores, y denuncia sin pelos en la lengua la oligarquía de los partidos. “Los políticos españoles que hemos tenido responsabilidades públicas a lo largo del último cuarto de siglo sabemos hasta qué punto los partidos son estructuras burocratizadas, opacas y oligárquicas, en las que pequeñas cúpulas que se reproducen a sí mismas controlan férreamente la organización impidiendo el debate y la libre competencia entre opciones”.
  
  Va más lejos y critica el sistema de 'sucesión', muy alejado a su juicio de la libre decisión de las bases. “Hemos llegado a la aberración de tragar con el hecho inaudito de que los líderes de determinadas formaciones decidiesen al retirarse de la primera fila designar sin disimulo a su sucesor hurtando a las bases su derecho inalienable a elegir a su cabeza de filas”.
  Ahora, afirma Vidal-Quadras, el “tinglado se ha venido abajo ahogado por la corrupción, la incompetencia, el deterioro institucional y el aumento del tamaño y la complejidad del Estado, entendido como agencia de colocación de leales, familiares y correligionarios”.
  
  Esta es la reflexión que el político popular ha hecho a la pregunta de un periodista sobre la solución a la actual crisis del sistema. ¿Su respuesta? Sencilla: La reforma del funcionamiento interno de los partidos para que sean auténticamente democráticos.
  
  ¿Es posible? A juicio de Vidal-Quadras, complicado. “Los supuestos encargados de llevar adelante estas iniciativas legislativas [ley de partidos y ley de su financiación] son los principales beneficiados de la insatisfactoria situación presente, por lo que su interés en modificarla es muy escaso.
  Se puede decir más alto. Más claro...  (La Gaceta)